En este mensaje llegamos a la tercera caída del hombre, la cual se relata en el capítulo seis de Bereshit. Si estudiamos Bereshit detenidamente, nos daremos cuenta de que el Ruaj haKodesh tiene la intención de mostrar la degradación continua del hombre. En cada paso el hombre cayó cada vez más bajo. El relato de Bereshit revela que la caída del hombre se produjo por lo menos en cuatro etapas. Podemos llamar a estos pasos las cuatro caídas del hombre. En cada caída el hombre descendió un paso más, cayendo cada vez más hasta llegar al punto más bajo. La tercera caída del hombre no fue la peor caída sino un paso más en su degradación. Como veremos, después de la tercera caída, hubo una cuarta. La caída del hombre fue tal que difícilmente podríamos imaginarla.
Primero, debemos considerar la causa de la tercera caída del
hombre. Podemos encontrar una razón o causa para cada caída. La causa de la
tercera caída del hombre no fue sencilla. Por supuesto, en cada caída fue el
hombre quien cayó, pero en cada caso la causa no fue el hombre solo, sino el
hombre en compañía del enemigo de Elohim. Ahora, en la tercera caída, el
enemigo dio otro paso, e hizo caer aún más al hombre. Vamos a descubrir cuál
fue ese paso adicional.
Los Benei Ha Elohim
Muchos creyentes han debatido y debaten aún si los
"hijos de Elohim" se refieren a los malajim o a los hombres. De
hecho, por siglos el cristianismo ha enseñado que existen dos líneas en
Bereshit 4: la línea de los descendientes de Shet, es decir, la línea del
pueblo piadoso, y la línea de los descendientes de Qayin. Ellos decían que los
hijos de Elohim eran los descendientes de Shet. Por pertenecer a Elohim, los
descendientes de Shet eran hijos de Elohim. También enseñaban que las hijas de
los hombres eran las hijas de los descendientes de Qayin. Pero si bien, como
vimos en el capítulo anterior, este último punto sí tiene una base histórica y
tradicional, aunque tampoco podemos decir que sea escritural, decir que los
hijos de Shet eran los Benei ha Elohim no tiene el menor sentido, sobre todo
cuando sabemos que este linaje quedó prácticamente desaparecido por corrupción
en la generación de Noaj.
En primer lugar, las palabras hebreas para los "hijos
de Elohim" son Benei ha Elohim, lo que quiere decir que estos son seres
celestiales, dándoles crédito a ellos como malajim, seres espirituales. Y luego
vemos que los hijos de estos hijos de Elohim y las hijas de los hombres eran
"gigantes". Algo en su genética los convertía en personas de gran
tamaño. Y ese algo era su ascendencia angelical caída. Pero nuevamente, debemos
seguir buscando en la Biblia para asegurarnos de su significado. La Biblia se
confirma a sí misma y un pasaje de las Escrituras siempre puede ser confirmado
por otro. Vemos el mismo término "hijos de Elohim" luego usado en el
libro de Iyov, que declara:
Un día los hijos de ha'Elohim se presentaron delante de Yahweh, y el
Satán vino junto con ellos. Iyov 1:6
Un día los hijos de ha'Elohim se presentaron delante de Yahweh. El
Satán vino junto con ellos para presentarse delante de Yahweh. Iyov 2:1
De nuevo, a partir de la lectura clara del texto, los
"hijos de Yahweh" no son hombres humanos, sino que en realidad son
malajim, que se reúnen en el cielo con Yahweh.
La tercera referencia a los hijos de Elohim en el Tanaj está
nuevamente en Iyov, pero esta vez en el capítulo 38. Yahweh está planteando
preguntas a Iyov sobre la creación del universo (para mostrar a Iyov cuán poco
entendimiento y conocimiento tiene comparado con Él) dice:
¿Dónde estabas tú cuando yo echaba los fundamentos de la tierra? Habla,
si tienes entendimiento. ¿Sabes quién fijó sus dimensiones o quién la midió con
un cordel? ¿Sobre qué están afirmados sus cimientos? ¿Quién puso su piedra
angular, cuando aclamaban juntas las estrellas del alba, y gritaban de júbilo
todos los hijos de Elohim? Iyov 38:4-7
Así que los Benei ha Elohim existieron incluso antes de que
la tierra misma fuera creada. Cada uso del término Benei ha Elohim en el Tanaj
es una referencia a los "seres angélicos". En la Septuaginta, la
forma más antigua del Tanaj de hoy, el término "hijos de Elohim" ni
siquiera se usa en estos pasajes de Iyov, simplemente dice "malajim de
Elohim". Por lo tanto, se puede concluir con certeza que los hijos de Elohim
en Bereshit 6 eran, de hecho, malajim.
Cuando decimos "malaj" estamos refiriéndonos a una
función, NO A UNA RAZA, como siempre nos han transmitido, la de
"mensajeros". Un malaj es un enviado, un mensajero, un embajador a
quien se lo envía con un encargo y en representación de Elohim. Como ya vimos
en los primeros estudios, las Escrituras dicen que el hombre fue hecho "un
poco inferior a los elohim", que la mayoría de las versiones traducen
"malajim". Los malajim son elohim, hijos de Elohim, de la familia de
Elohim, de su "raza".
El Sefer Janój, absolutamente canónico para la Iglesia
Ortodoxa Etíope y canónico para todos antes de que el cuerpo rabínico lo
eliminara junto con otros, y del cual sólo tenemos las copias en ge'ez y unos
pocos fragmentos en hebreo, también los menciona:
Luego, mi abuelo Enoc me tomó por la mano, me levantó y me dijo:
"Vete, porque le he preguntado al Señor de los espíritus sobre esta
sacudida de la tierra; Él me ha dicho: "Por causa de su injusticia se ha
determinado su juicio y no será detenido por mí nunca porque las brujerías que
ellos han buscado y aprendido, la tierra y los que habitan en ella, serán
destruidos". En cuanto a esos malajim, no habrá lugar para su
arrepentimiento, porque han revelado lo que era secreto y están malditos...
Sefer Janój 65:9-11
En este libro sus jefes (los jefes de los malajim) son
llamados VIGILANTES, lo que parece ser un tipo de jerarquía, así como un malaj es
un mensajero:
He aquí los nombres de estos Vigilantes: Shemihaza, quien era el
principal y en orden con relación a él, Ar'taqof, Rama'el, Kokab'el, -'el,
Ra'ma'el, Dani'el, Zeq'el, Baraq'el, "Asa'el, Harmoni, Matra'el,
"Anan'el, Sato'el, Shamsi'el, Sahari'el, Tumi'el, Turi'el, Yomi'el, y
Yehadi'el. Y los que siguen son los nombres de sus malajim, de sus jefes de
centenas y cincuentenas. El primero es Yeqon... Sefer Janój 69:2-4
El Génesis Apócrifo menciona a una raza específica de seres
celestiales conocidos en el idioma hebreo como los עיר (ir en singular), que significa "aquellos
que vigilan" o "los que están despiertos", y que fue traducido
al griego como egregoris, o grigori, es decir "Los Vigilantes". Estos
"Vigilantes" son personajes muy importantes en las páginas del Sefer
Janój y el Sefer Yobelim. Así también (como "ir") aparecen en las
propias Escrituras, pero referidos a los que no cayeron, en el libro de
Daniyel:
La sentencia fue por decreto de los vigilantes (IR, H5894), la decisión por la palabra de los santos... Daniyel 4:17
Así siendo que los Vigilantes son malajim (pero no todos
los malajim son vigilantes, así como todos los generales son militares, pero no
todos los militares son generales), ahora vienen los acontecimientos:
Así sucedió, que cuando en aquellos días se multiplicaron los hijos de
los hombres, les nacieron hijas hermosas y bonitas; y los Vigilantes, hijos del
cielo las vieron y las desearon, y se dijeron unos a otros: "Vayamos y
escojamos mujeres de entre las hijas de los hombres y engendremos hijos". Sefer
Janój 6:1-2
Una más que clara repetición de la historia que se menciona
en Bereshit. Pero agrega más detalles:
Y el Señor dijo a Gabriel: "Procede contra los bastardos y
réprobos hijos de la fornicación y haz desaparecer a los hijos de los
Vigilantes de entre los humanos y hazlos entrar en una guerra de destrucción,
porque no habrá para ellos muchos días. Ninguna petición en su favor será
concedida, porque esperan vivir una vida eterna o que cada uno viva quinientos
años. Y a Miguel le dijo el Eterno: ve y anuncia a Shemihaza y a todos sus
cómplices que se unieron con mujeres y se contaminaron con ellas en su impureza,
¡que sus hijos perecerán y ellos verán la destrucción de sus queridos!
Encadénalos durante setenta generaciones en los valles de la tierra hasta el
gran día de su juicio. En esos días se les llevará al abismo de fuego, a los
tormentos y al encierro en la prisión eterna. Sefer Janój 10:10-13
Creo que ya no deberían quedarnos dudas: los malajim se
unieron a las mujeres humanas y tuvieron hijos. Nada de "hijos de
Seth", eran seres del plano espiritual.
También son mencionados en el llamado Libro Segundo de Enoc:
Estos son los grigori que apostataron de Yahweh (doscientas miríadas en
total) juntamente con su caudillo Satanael, y los que siguieron sus huellas y
se encuentran ahora con grilletes y sumergidos en una espesa niebla en el
segundo cielo. Estos son los que, desde el trono de Yahweh, descendieron a la
tierra, al lugar llamado Hermón, mancillando la tierra con sus fechorías. Las
hijas de los hombres cometen muchas abominaciones en todas las épocas de este
siglo, transgrediendo la ley, mezclándose (con ellos) y engendrando a los
grandes gigantes, los monstruos y la gran iniquidad. Y por esta razón (Yahweh)
los condenó en un gran juicio, mientras que ellos lloran a sus hermanos y
esperan su confusión en el día grande de Yahweh. Libro de los Secretos de Janój
7:5-9
La implicación aquí es que los malajim caídos cometieron
fornicación con seres humanos, dando así un ejemplo que habrían de seguir más
adelante Sodoma y Gomorra. Tocante a ese punto, debemos leer cuidadosamente:
También a los mensajeros que no guardaron su primer estado sino que
abandonaron su propia Tabernáculo, los ha reservado bajo tinieblas en prisiones
eternas para el juicio del gran día. Asimismo, Sodoma, Gomorra y las ciudades
vecinas, de la misma manera que aquéllos, se dedicaron a la fornicación y
fueron en pos de una carne diferente, fueron puestas por ejemplo, sufriendo la
pena del fuego eterno. Yahudah 1:6-7
Cuando Kefá y Yahudah escribieron acerca de la degradación,
usaron como trasfondo los hechos relatados en Bereshit. En el pasuk 6, Yahudah
dice que los malajim no guardaron su principado. Aquí el principado significa
el dominio o gobierno de los malajim, y se refiere a la esfera de su dominio.
¿Cuál es el principado o la esfera de los malajim? En Efesiyim 2.2 y 6.12 se
nos indica que su principado es el aire. El Tabernáculo de Elohim es el tercer
cielo, el Tabernáculo del hombre es la tierra, y la de haSatán y sus malajim es
el aire. Cuando Yahudah 6 dice que los malajim no guardaron su principado, sino
que abandonaron su habitación, quiere decir que abandonaron la esfera del aire,
bajaron a la tierra, y contrajeron matrimonio ilícitamente con seres humanos.
Elohim ha guardado estos malajim caídos bajo las tinieblas en prisiones eternas
hasta el juicio del gran día.
La palabra "asimismo" de Yahudah 7 indica que este
pasuk es la continuación del pasuk 6. Ya que el sujeto de esta frase no es
solamente Sodoma y Gomorra, sino también "las ciudades vecinas",
necesitamos una coma después de "vecinas". Por lo tanto, Sodoma,
Gomorra y las ciudades vecinas son el sujeto de la frase. El predicado es
"fueron puestas por ejemplo,
sufriendo la pena del fuego eterno". Sodoma y Gomorra y las ciudades
vecinas fueron puestas como ejemplo. Entre el sujeto y el predicado tenemos el
calificativo "de la misma manera que
aquéllos, se dedicaron a la fornicación y fueron en pos de una carne
diferente". ¿A quiénes se refiere "aquéllos"? Se refiere a
los malajim caídos mencionados en el pasuk anterior. ¿Qué significa "de la
misma manera"? Significa la manera de ir "en pos de una carne diferente". Los malajim caídos
fueron en pos de la carne humana. Sodoma, Gomorra y las ciudades vecinas
también fueron "en pos de una carne diferente", en pos de la carne
angélica. Los sodomitas pueden haber practicado el pecado de la homosexualidad,
pero eso no fue el problema principal, sino que BUSCABAN TENER RELACIONES CON
LOS CAÍDOS. Esto significa que estas ciudades siguieron el ejemplo de los
malajim caídos. No inventaron esa clase de fornicación, sino que siguieron el
ejemplo de los malajim caídos. Los malajim no son una raza diferente, son
hombres que no han caído, como Adam-Satán, los vigilantes y otros. Elohim no
creó muchas razas, sino una sola, Y EN ESA HUBO UN GRAN PROBLEMA, el que está tratando
de resolver para restaurar TODAS LAS COSAS, ASÍ EN LA TIERRA COMO EN LOS
CIELOS...
Nosotros no debemos olvidar que el producto de estas
relaciones es llamado:
...los héroes de antaño, los hombres de renombre. Bereshit 6:4
También Flavio Josefo los relaciona:
Muchos ángeles de Elohim convivieron con mujeres y engendraron hijos
injuriosos que despreciaban el bien, confiados en sus propias fuerzas; porque
según la tradición estos hombres cometían actos similares a los de aquellos que
los griegos llaman gigantes. Flavio Josefo III, 1
Los Nefilim fueron "los héroes de antaño, los hombres
de renombre". De manera que, si nos ponemos a pensar que una mujer que se
unía a un caído engendraba héroes (o monstruos, también los hubo, pero sobre
todo fueron producto de cruzas entre ellos mismos), por así decir, "se
paraba para el resto de la vida", tenía la vida asegurada. O sea, era como
sacarse la lotería, el premio grande: habría riquezas y fama y palacios y etc.
para esta gente. Por eso cuando los habitantes de Sodoma, Gomorra y las otras
ciudades buscaban relacionarse con los enviados:
Ellos llamaron a Lot, y le dijeron: "¿Dónde están los hombres que
vinieron a quedarse contigo esta noche? ¡Sácalos afuera a nosotros! ¡Queremos
tener sexo con ellos!". Bereshit 19:5
Ellos no estaban simplemente tratando de practicar la
homosexualidad sino tratando de engendrar nuevos "poderosos".
Comprendamos que las leyendas de Mesopotamia florecieron en base a gigantes y
relaciones sexuales entre humanos y malajim. Los gigantes/semidioses que
persistentemente se abren camino hacia la superficie desde los primeros
registros de la historia prediluviana fueron todos descendientes de dioses, que
fueron malajim caídos; este es un tema muy común en la antigua mitología
panteísta. Estos desconcertantes Titanes heredaron un prejuicio beligerante y
desenfrenado por la batalla y la brutalidad, tal como se dice que lo hicieron
los Nefilim. De manera que lo que aquí vemos no son "copias" sino un
origen común a las mismas leyendas.
Los malajim oscuros que cometieron
perversiones sexuales fueron marcaron como "malajim caídos"; se
rebelaron contra Elohim, junto con Adam-Satán. A pesar de que la descendencia
apóstata de los malajim prosperó durante un tiempo, Elohim no miró
favorablemente a los malajim caídos, que participaron en un acto tan vil contra
las leyes de la creación. Elohim encerró a los apasionados malajim caídos hasta
el momento del fin, en el Abismo. Junto con ellos hubo otros, todos los que
murieron en la primera catástrofe, el gran "diluvio" o lo que sea que
haya sido que dejó a la tierra "desordenada y vacía", y cubierta de
agua y oscuridad. Estos fueron los rujot a quienes Yahshua visitó durante los
tres días que estuvo aún en el Sheol:
Él fue entregado a muerte en la carne, pero resucitado por el Ruaj; y de esta forma fue y les hizo una proclamación a los rujot en prisión, a aquellos que fueron desobedientes hace mucho tiempo en los días de Noaj, mientras Yahweh pacientemente esperó durante la construcción del Arca, en la cual pocas personas, para ser específico, ocho, fueron salvados por medio de agua. Kefá Alef 3:18-20
Consecuencias De La Tercera Caída
1. Destrucción Del Matrimonio Y La Familia
El matrimonio es algo kadosh, instituido por Elohim para
declarar su propósito de recuperar lo perdido, la parte caída. "ser una
sola carne" es la forma simple en que Él pintó el cuadro de la
restauración a la unidad de las partes divididas. Además es una sombra de la
unión de Mashíaj con su Novia, las congregaciones de creyentes en su totalidad.
Nadie debe considerar el matrimonio de manera liviana. Todos debemos
considerarlo santo, COMO TODO LO QUE ELOHIM LEVANTA:
Por lo tanto, lo que Elohim ha unido, no lo separe el hombre. Marcos 10:9
Téngase en alta estima entre todos el matrimonio, y mantengan pura la relación conyugal, pero Elohim juzgará a los fornicarios y a los adúlteros. Ivrim 13.4
Hay un principio estricto acerca del matrimonio: el
principio de que el marido debe tener una sola esposa. Y como vemos, ni
siquiera se establece la regla de que debe ser entre HOMBRE Y MUJER, eso queda
descartado porque Elohim sacó a la mujer del hombre, no sacó otro hombre.
Elohim dispuso este principio santo para preservar el linaje humano en la
debida condición a fin de cumplir Su propósito. Cualquier otro tipo de relación
(hombre con hombre o mujer con mujer) NO OBEDECE A LA FINALIDAD DE
REPRODUCCIÓN, por eso no es correcto. No obstante, cuando el hombre cayó por
tercera vez, el enemigo astuto se introdujo para quebrantar el principio santo de
ejad del matrimonio humano, usando a sus malajim caídos, quienes tomaron
cuerpos humanos a fin de unirse con mujeres. Si en vez de pensar en razas
extrañas comprendemos que sólo se trata de hombres que fueron creados como el
Adam Primigenio, "varón y hembra en uno" (Y SÓLO DE ESA MANERA PODÍA
ELOHIM SACAR A LA MUJER DEL HOMBRE), comprenderemos que ellos tenían ambos
principios en sí mismos, y esto iba a traer algún tipo de conflicto genético,
muy probablemente. Y sin duda, estas acciones violaron el principio del
matrimonio que protegía la pureza del género humano.
Todos debemos aprender esa lección: la fornicación es algo
grave. En toda las Escrituras, y particularmente en la enseñanza de Yahshua ha
Mashíaj (MattiYah 19.9), la fornicación se considera un asunto grave. Cuando
leemos las epístolas del B'rit Hadashá, podemos ver que los apóstoles eran muy
estrictos y no toleraban la fornicación en la vida de congregación de creyentes
(Qorintiyim Alef 6.9-10, 18; Efesiyim 5.5). ¿Por qué eran tan estrictos? Si
leemos las Escrituras, descubriremos que la fornicación está relacionada con la
idolatría (Hitgalut 2.14,20). La palabra hebrea zanáh y otras formas afines
transmiten la idea de prostitución, ayuntamiento o relación sexual inmoral y
fornicación, y se relaciona con el adulterio espiritual, o sea, la idolatría.
El culto a los ídolos fomenta la fornicación.
Si leemos el libro de Bamidbar, veremos que cuando los
israelitas adoraban ídolos, cometían fornicación:
Cuando Yisrael estaba en Shitim, el pueblo se profanó prostituyéndose
con las mujeres Moavitas, quienes invitaban al pueblo a sus sacrificios para su
deidad. El pueblo participó de ellos y adoraron aquella deidad. Bamidbar 25:1-2
El culto a los ídolos lleva a la fornicación, y la
fornicación conduce a la idolatría. Pero eso no sucede en la verdadera
adoración de Elohim. El verdadero culto a Yahweh nos mantiene puros en cuanto
al matrimonio, preservando el principio que Él estableció. Pero cuando la gente
se embebe en la fornicación, pierde la razón y deja la puerta abierta para que
entren los demonios, los cuales toman plena posesión de su persona. Ningún
fornicario se preocupa por su intelecto ni por su raciocinio. Deja de ser lógico
y normal. Si usted es racional y normal, se preocupará por someter su intelecto
o su raciocinio al ruaj, y no hará nada que quebrante el principio establecido
por Elohim.
El matrimonio ilícito de malajim caídos con seres humanos no
sólo quebrantó el principio del matrimonio, sino que contaminó la humanidad.
¿Cuál era la intención del satán al hacer eso? Su intención no consistía
solamente en corromper el linaje humano, sino también en contaminarlo para
atraerlo a sí mismo, porque desde el comienzo NO HA DEJADO DE LADO SU DESEO DE hasta
el punto de convertirlo en una mezcla de humanidad con rujot caídos, a fin de
hacer desaparecer por completo la descendencia de la mujer. Los malajim caídos
establecieron ese ejemplo de quebrantar el principio del matrimonio. Sodoma,
Gomorra y las ciudades circunvecinas siguieron ese ejemplo al quebrantar el
principio que Elohim había establecido.
Ahora podemos entender la razón por la cual Elohim envió el
diluvio sobre el género humano y lo condenó a muerte. Elohim decidió hacerlo
porque el hombre se había mezclado. Ahora podemos entender también la razón por
la cual Yahweh consumió con fuego a Sodoma, a Gomorra y a las ciudades vecinas.
2. El Hombre Hecho Carne: El Hombre Caído
Ya vimos que la primera causa de la tercera caída del hombre
fue la mezcla de los rujot malignos con la humanidad. Consideremos ahora la
segunda causa: que el hombre se hizo carne.
"Y dijo Yahweh: no contenderá mi ruaj con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne". Bereshit 6.3
En la primera caída, el hombre no ejercitó su ruaj. En la
segunda caída, él usó excesivamente su alma. Qayin no sabía nada acerca de su
ruaj, pero sí ejercitó sobremanera su alma, e inventó una religión. En la
tercera caída, el hombre abusó del cuerpo caído y se volvió carne por completo.
El hombre no sólo descuidó su ruaj, sino también su alma. El hombre descuidó el
intelecto y el raciocinio de su alma y tanto su ruaj como su alma quedaron
sometidos a los deseos de su cuerpo. Por eso Yahweh retiró por completo Su Ruaj
después del Diluvio, limitándose a usarlo en contadas personas, cuando Él lo
deseaba; por ejemplo, los profetas.
Hoy en día, mucha gente se encuentra en la misma situación.
Ellos no se preocupan por el ruaj, por la presencia de Elohim, y tampoco se
preocupan por su alma ni por su intelecto ni por su raciocinio. Hoy la gente
simplemente abusa de su carne y actúan casi como animales. Cuando el hombre se
encuentra en tal condición, ha llegado a lo más bajo. Por eso sabemos que
estamos en los mismos tiempos de Noaj.
Las Escrituras revelan que el peor y más maligno enemigo de
Elohim es nuestra carne.
Los que actúan según su inclinación carnal tienden a lo carnal, pero
los que actúan según su inclinación espiritual tienden a lo espiritual. Y la
tendencia carnal lleva a la muerte, pero la tendencia espiritual produce vida y
paz. Es que la tendencia carnal lleva a la enemistad con Elohim; porque no se
sujeta a la Torah de Yahweh, ni tampoco puede. Así que, los que se dirigen por
la inclinación carnal no pueden agradar a Elohim. Romaniyim 8:5-8
Por eso digo: Anden en el espíritu, y así jamás satisfarán los malos
deseos de la carne. Porque la carne desea lo que es contrario al espíritu, y el
espíritu lo que es contrario a la carne. Ambos se oponen mutuamente, para que
ustedes no hagan lo que quisieran. Pero si se dejan guiar por el espíritu, no
están bajo la ley. Ahora bien, las obras de la carne son evidentes. Estas son:
fornicación, impureza, desenfreno, idolatría, hechicería, enemistades, pleitos,
celos, ira, contiendas, disensiones, partidismos, envidia, borracheras, orgías
y cosas semejantes a éstas, de las cuales les advierto, como ya lo hice antes,
que los que hacen tales cosas no heredarán el reino de Elohim. GalutYah 5:16-21
Elohim aborrece totalmente la carne; no la tolera. En cierto
sentido, Elohim puede tolerar nuestros errores y transgresiones, pero jamás
tolerará la carne. Cuando decimos "carne", evidentemente NO NOS
ESTAMOS REFIRIENDO AL CUERPO HUMANO, sino a la carnalidad que surge cuando lo
que gobierna al hombre es únicamente el interés por satisfacer los deseos de
los sentidos físicos. Todo lo que procede de nuestra carne constituye una
ofensa para Él. Durante la tercera caída, todo el linaje humano se hizo carne. Por
lo tanto, Elohim se presentó y dijo a Su siervo Noaj que iba a destruir a toda
esa generación.
Vemos entonces que la primera consecuencia de la tercera
caída del hombre fue la retirada del Ruaj haKodesh, lo cual significa que
Elohim abandonó al hombre. Yahweh dijo: "No
contenderá mi Ruaj con el hombre para siempre". Dicho pasaje demuestra
que antes de aquel tiempo el Ruaj de Elohim obraba y contendía continuamente
con el hombre. Es la segunda vez que se menciona el Ruaj en el libro de
Bereshit. La primera vez aparece en 1.2, donde vemos que el Ruaj de Elohim se
cernía sobre la situación de muerte para traer la vida a la existencia. Cuando
se menciona el Ruaj por segunda vez, vemos que Elohim el Ruaj dejaría de
contender con el hombre, lo cual demuestra que antes de eso el Ruaj había
luchado y trabajado. Elohim estaba lleno de gracia. No se imaginen que Hevel
era bueno por sí mismo. Eso era imposible. Todos los santos mencionados en
Bereshit 5 fueron ayudados por el Ruaj de Elohim. Janój fue ayudado,
fortalecido y motivado por el Ruaj de Elohim. El Ruaj de Elohim luchaba contra
la rebelión del hombre. No obstante, en Bereshit 6 alcanzamos el punto en que
el Ruaj de Elohim dejó de luchar y se retiró.
La tercera caída del hombre prefiguraba la era presente.
Yahshua ha Mashíaj comparó el presente siglo con los días de la tercera caída
(MattiYah 24.37-39). El Mashíaj dijo que antes del diluvio, estaban comiendo,
bebiendo, casándose y dándose en casamiento, hasta el día en que Noaj entró en
el arca y vino el diluvio y se los llevó a todos. Lo único que la gente hacía
era comer, beber, casarse y darse en casamiento. La situación de hoy es
idéntica a la situación que precedió el diluvio. La gente está entregada a
comer, beber y casarse, pero no conoce el juicio venidero. Ellos actúan como si
no hubiera un Elohim en el universo. No se preocupan por el juicio venidero.
Pero las Escrituras aseguran que Elohim todavía está en el trono y que la
tierra le pertenece a Él. Un día Él intervendrá y ejercerá Su juicio sobre esta
era impía.
3. Los Nefilim
Este matrimonio ilícito entre los malajim caídos y el género
humano produjo los nefilim. "Los
valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre", en 6.4,
fueron el resultado de la mezcla de los malajim caídos con el género humano. La
palabra hebrea nefilim, que algunas versiones traducen
"gigantes" en Bereshit 6.4 y Bamidbar 13.33, significa "seres
caídos", "los que cayeron". Esta palabra se refiere a los
malajim caídos. No obstante, los nefilim no eran malajim solamente, sino el producto
de la mezcla entre los malajim caídos y las hijas de los hombres. Fueron el
resultado de la mezcla entre el género humano, es decir, la sangre y carne
humana, y los rujot de los elohim.
Las Escrituras revelan que los nefilim eran "hombres de gran estatura"
(Bamidbar 13.32). Al verlos uno se atemorizaría. Es exactamente lo que les
ocurrió a diez de los doce espías que Moshe envió a explorar la tierra de
Canaán. Ellos vieron gigantes y creyeron haber visto a los nefilim (un error
que analizaremos en su momento) y se horrorizaron:
Vimos a los nefilim -los anakitas son parte de los nefilim- y nosotros
nos veíamos como saltamontes, y así deben habernos visto ellos también.
Bamidbar 13.33
Elohim mandó el diluvio para exterminar la generación de
Noaj porque la sangre de esa generación se había hecho impura. Del mismo modo,
Elohim mató a todos los cananeos porque el ADN nefilim estaba nuevamente entre
ellos, y la sangre de ese linaje había vuelto a ser impura. Elohim no podía
tolerar esa situación. Para cumplir Su propósito, Él no podía permitir la
existencia de una humanidad así.
Es esencial que entendamos a los
Nefilim como una raza legendaria de gigantes mitologizados que coexistieron con
la humanidad en el mundo antiguo, y no como leyendas para asustar a los niños.
Los Nefilim cultivaron su propia cultura, religión y base de conocimientos, no
se trató simplemente de gigantes medio idiotas, brutales y caníbales, no,
algunos de ellos fueron considerados héroes. De manera que la idea popular es
confusa, porque conocemos muy poco acerca de las fuentes e inspiraciones de
esta raza antigua y misteriosa. ¿Qué impacto tuvieron su cultura, religión o
conocimiento en el mundo antiguo? ¿Y EN EL ACTUAL? Para resolver el misterio
Nefilim, debemos retroceder para comprender los eventos oscuros e inexplicables
que precedieron al diluvio en la época antediluviana, y sobre todo tratar de
posicionarnos en la mentalidad de la época.
Cuando los hombres comenzaron a
aumentar en la tierra y les nacieron hijas, los hijos de ha'Elohim vieron cuán
hermosas eran las hijas de los hombres y escogieron esposas de entre las que
les agradaban. Pero Yahweh dijo: "Mi aliento no permanecerá en el hombre
para siempre, ya que él no es más que carne; que se le concedan sólo ciento
veinte años". Fue entonces, y también más tarde, cuando aparecieron los
Nefilim en la tierra, cuando los hijos de ha'Elohim cohabitaron con las hijas
de los hombres, quienes les dieron descendencia. Ellos fueron los héroes de
antaño, los hombres de renombre. Yahweh vio cuán grande era la maldad del
hombre sobre la tierra, y cómo todo plan ideado por su mente no era sino
perverso todo el tiempo. Bereshit 6:1-5
Quedaron embarazadas de ellos y
parieron gigantes de unos tres mil codos de altura que nacieron sobre la tierra
y conforme a su niñez crecieron; y devoraban el trabajo de todos los hijos de
los hombres hasta que los humanos ya no lograban abastecerles. Entonces, los
gigantes se volvieron contra los humanos para matarlos y devorarlos; y
empezaron a pecar contra todos los pájaros del cielo y contra todas las bestias
de la tierra, contra los reptiles y contra los peces del mar y se devoraban los
unos la carne de los otros y bebían sangre. Entonces la tierra acusó a los
impíos por todo lo que se había hecho en ella. Sefer Janój capítulo 7
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