20 de julio de 2020

AHD049 - El Quinto Mandamiento - ''Honra A Tu Padre Y A Tu Madre'' 06




02 - Nuestros Padres 01

Conceptos Erróneos Sobre Honrar A Los Padres

Algunos creen que los hijos que honran a sus padres dejan que ellos controlen su matrimonio, sus finanzas, y en general sus vidas.



Al contrario, las Escrituras enseñan que la unión entre el esposo y la esposa tiene prioridad sobre las demás relaciones familiares.

Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y llegan a ser una sola carne. Bereshit 2:24

Claro está, los casados pueden sacar provecho de los consejos de los padres o suegros:

Oye a tu padre que te engendró; no desdeñes a tu madre cuando sea vieja. Mishlei 23:22

Ahora bien, un matrimonio puede decidir, y con razón, limitar cuánto van a intervenir los familiares en su relación (MattiYah 19:6).


Otros creen que los padres son los que tienen la máxima autoridad.

Es cierto que Elohim sí les ha dado autoridad sobre la familia, pero la autoridad de cualquier ser humano es limitada, porque nadie tiene mayor autoridad que Elohim. Por ejemplo, cuando un alto tribunal ordenó a los discípulos de Yahshua que desobedecieran a Elohim, ellos dijeron: "Tenemos que obedecer a Elohim como gobernante más bien que a los hombres" (MaAseh 5:27-29). De la misma manera, los hijos deben obedecer a los padres "en unión con el Adón", es decir, en todo lo que no vaya en contra de las leyes de Elohim (Efesiyim 6:1).


Mandamiento Con Promesa

"Honra a tu padre y a tu madre, PARA QUE PUEDAS VIVIR MUCHO TIEMPO EN LA TIERRA la cual Yahweh tu Elohim les está dando". Shemot 20:12

Este respeto no se refiere a un comportamiento externo decoroso, sino en un verdadero respeto y amor por nuestros padres. También se refiere al honrarlos con su substancia, alimentándolos, vistiéndolos y supliéndoles con lo necesario para la vida, cuando estén en necesidad.

El honrar a los padres involucra alta estima, reverencia y ayuda. Significa el estar ahí pendiente de ellos, cuidarlos. En comparación con los otros mitzvot, donde no se adjunta directamente alguna promesa específica, Yahweh, al dar este mitzvot también agregó una promesa determinada de alargar la vida de los hijos.

Pero esto no termina aquí, ya que en Devarim 5:16 nos señala el mismo mitzvah pero con una promesa adicional adjunta:

Honra a tu padre y madre PARA QUE TE VAYA BIEN en La Tierra que Yahweh tu Elohim les está dando.

Además vemos como Shaúl unifica ambos:

"Honra a tu padre y a tu madre, este es el primer mitzvah que tiene promesa, para que te vaya bien, y vivas una larga vida en la tierra". Efesiyim 6:2-3

De manera que los hijos que honran a sus padres viven más y mejor. Los padres representan a nuestro Padre celestial, y si cuando honramos a nuestros padres terrenales promete aumentar nuestros años y hacernos bien, cuánto más no bendecirá nuestra vida si respetamos y honramos a nuestro Padre celestial.

La inversa también tiene su castigo:

"Porque Moshe dijo: Honra a tu padre y a tu madre; y cualquiera que maldiga a su padre o a su madre, tiene que ser puesto a muerte". Mordejai 7:10

Esto viene de Vayikra:

Si alguno insulta a su padre o a su madre, se le dará muerte; ha insultado a su padre o a su madre –su culpa de sangre esté sobre él. Vayikra 20:9

También se nos señala el peligro que corre el hijo al maldecir a sus progenitores:

Al que insulta a su padre o a su madre, le fallará la luz cuando llegue la oscuridad. Mishlei 20:9

El verbo "maldecir" es el verbo en griego KAKOLOGEO (G2551) que significa "hablar maldad". Cualquiera que hable maldad en contra de su padre o su madre tiene que morir.

La palabra hebrea para maldecir es CALAL (H7043) que es hablar despreciativamente, irrespetar, o poner a nada a una persona. Así que toda habladuría que tienda a reducir a nuestros padres a los ojos de otros. Y el tratar a los padres con lenguaje injurioso u humillante es un pecado de muerte.


Honrar A Los Padres, La Base Del Respeto

Los últimos seis mandamientos, del quinto al décimo, rigen los aspectos del comportamiento humano que más profundamente afectan a los individuos, las familias, los grupos y la sociedad. Pero como ya hemos dicho, este quinto es una bisagra entre los mandamientos acerca de Yahweh (relación vertical) y los mandamientos entre hermanos (relación horizontal). Si no amamos primero al Padre, no tendremos amor con el cual amar a los hermanos. ¿Alguien tiene dudas de dónde proviene la carencia que está afectando nuestro mundo? El mundo no ama al Padre, por lo tanto no tiene la capacidad de amar a nadie.

Es impresionante la forma en que abusamos y nos aprovechamos los unos de los otros. El número y la magnitud de los actos violentos entre nosotros no tienen excusa. Necesitamos con urgencia poner fin a los terribles resultados de nuestra incapacidad de llevarnos bien, porque esto transgrede el segundo gran mandamiento de Mashíaj: amarnos los unos a los otros. Tenemos que aprender cómo estar en paz y armonía en todos los aspectos de la vida, para poder disfrutar de relaciones amorosas, estables y duraderas.

El propósito de los últimos mandamientos es establecer los principios básicos mediante los cuales es factible tener buenas relaciones interpersonales. Definen con absoluta claridad los aspectos del comportamiento en los que la naturaleza humana crea los obstáculos más grandes para la paz y la colaboración, y nos proporcionan la guía que necesitamos para derribar esos obstáculos.

El quinto mandamiento establece la pauta para esta segunda sección del Decálogo. Tiene que ver con la importancia de aprender a tratarnos respetuosa y honorablemente unos a otros.

El comienzo de las buenas relaciones interpersonales es aprender a ser responsables por nuestra conducta y carácter propios. Nuestro carácter, que es lo que gobierna nuestra conducta, empieza a formarse desde la infancia. Es precisamente en nuestros primeros años de vida cuando se forman las actitudes que habrán de controlar nuestros deseos personales en relación con los deseos y necesidades de los demás.

Este es el aspecto principal del quinto mandamiento: la importancia de aprender a respetar a otros cuando aún somos niños.

El quinto mandamiento nos muestra cómo y de quién aprendemos más eficientemente las bases del respeto y el honor. Nos guía para que sepamos cómo someternos a otros, cómo someternos apropiadamente a la autoridad y cómo recibir la influencia de maestros y consejeros. Por eso es que el apóstol Shaúl escribió:

"Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra" Efesiyim 6:2-3

Cuando los niños obedecen este mandamiento les ayuda a establecer un patrón de respeto hacia las normas, tradiciones, leyes y principios correctos. Honrar a los demás debe ser un hábito natural aprendido durante la niñez, decurrente de haber aprendido a honrar a los padres.

La validez universal de este importantísimo principio es clara.

Honren a todos; amen a los hermanos; respeten al Elohim; honren al soberano. Kefá Alef 2:17

Todo esto empieza con el respeto y honra que les demostramos a nuestros padres.











_________________________________________________________________________

Publicado por: Anunciadora de Sión


SOY CREYENTE EN YAHSHUA, MIEMBRO DE LA NOVIA, ÓRGANO DEL CUERPO, CO-EDIFICADORA DEL REINO

________________________________________________________________________

Lo que proviene del Ruaj pertenece al Cuerpo, porque el Ruaj no tiene Copyright.
Y si el hombre reivindica "derechos de autor", su mensaje proviene de la carne y no sirve.
_________________________________________________________________________



No hay comentarios.:

Publicar un comentario