Sabemos que el Adón Yahshua ha tratado con el pecado de nuestra carne en el madero. Y la Palabra nos informa que
"Nuestro viejo yo fue clavado en el madero con Él". Romaniyim 6:6
En lo referente al
asunto del pecado, al hombre no se le exige que haga nada. Sólo tiene que
considerar esto como un hecho consumado:
Así también ustedes, considérense muertos para efectos del pecado, pero vivos para Elohim en el Mashíaj Yahshúa. Romaniyim 6:11
En las Escrituras
jamás se nos dice que tenemos que ser clavados en el madero por el pecado. Sin
embargo, SÍ QUE NOS EXHORTA A QUE LLEVEMOS EL MADERO PARA NEGAR AL YO, que es
nuestra alma. El Adón Yahshua en muchas ocasiones nos manda que nos neguemos a
nosotros mismos, llevemos el madero y le sigamos. La explicación de esto es que
la forma en que Adón Yahshua trata nuestros pecados y nos trata a nosotros
mismos es muy distinta.
PARA CONQUISTAR EL
PECADO POR COMPLETO EL CREYENTE SÓLO NECESITA UN MOMENTO, PORQUE NO SE TRATA DE
ALGO QUE ÉL HAGA SINO DE ALGO QUE YAHSHUA YA HIZO. PERO PARA NEGAR AL YO
NECESITA TODA LA VIDA. Yahshua sólo llevó nuestros pecados en el madero, pero
se negó a sí mismo durante toda su vida. Nosotros debemos hacer lo mismo.
La carta de Shaúl a
los GalutYah describe la relación entre la carne y el creyente. Por un lado nos
dice que...
"Los que pertenecen a Yahshua ha Mashíaj han clavado en el madero a la carne con sus pasiones y deseos" GalutYah 5:24
...pero no como algo
que HAYAN HECHO ELLOS MISMOS, SINO QUE LO HAN OBTENIDO AL ACEPTAR EL HECHO
CONSUMADO POR YAHSHUA HA MASHÍAJ. El mismo día que una persona se identifica
con el Adón Yahshua acepta también el hecho de que su carne ha sido clavada en
el madero, lo entienda o no. Digamos que es una de las cláusulas del contrato,
que una vez firmado da validez a TODO EL CONTRATO, aunque no lo hayan leído por
completo.
Ahora bien, alguien
podría pensar, sin la instrucción del Ruaj haKodesh, que su carne ya no
existe, porque ¿acaso no ha sido clavada en el madero? ¿No es que murió? Así
muchos han pretendido justificar un libertinaje total o parcial a lo largo de
los siglos, condenándose a sí mismos y siendo muestra clara, por su falta de
frutos, de su no-regeneración, de que no tienen nuevo hombre. Pero, por otro
lado, la carta nos dice:
"Anden en el Ruaj y no satisfagan los deseos de la carne. Porque los deseos de la carne se oponen al Ruaj, y los deseos del Ruaj se oponen a la carne" GalutYah 5:16-17
Aquí se nos dice
claramente que el que pertenece a Yahshua ha Mashíaj y que ya tiene al Ruaj
haKodesh viviendo en él, AÚN TIENE LA CARNE EN ÉL.
¿Qué podemos decir?
¿Son contradictorios estos dos textos bíblicos? No. El pasuk 24 pone énfasis en
el pecado de la carne, mientras que el pasuk 17 lo pone en el yo de la carne.
El madero de Mashiaj trata con el pecado, y el Ruaj haKodesh trata con el yo
por medio del madero. Mashiaj libera por completo al creyente del poder del
pecado por medio del madero para que el pecado no vuelva a reinar, pero
Mashiaj, por medio del Ruaj haKodesh que vive en el creyente, lo capacita para
vencer al yo día tras día y para que le obedezca a Él por completo. Una cosa es
la puerta, otra es el camino. Esto es lo que hemos mencionado de la
"transferencia de poder", del alma al nuevo ruaj. Hemos sido
liberados del poder del pecado PARA PODER VENCERLO, no para sentarnos en los
laureles de Yahshua. Acá comprendemos lo que tantos creyentes se niegan a ver:
que, como está escrito:
El Mashíaj nos redimió de la maldición de la Torah al hacerse maldición por nosotros. GalutYah 3:13
Su muerte nos ha
liberado DE LA MALDICIÓN DE LA TORAH, PERO
NO DE LA TORAH; al contrario, NOS HA CAPACITADO PARA QUE AHORA HAGAMOS
LAS COSAS BIEN, COMO DEBERÍAMOS HABER HECHO DESDE EL COMIENZO, porque Él mismo
es la Torah. Esa capacitación no es "VIVIR A TRAVÉS DE OTRA PERSONA",
es decir, de Mashíaj, sino que ESA OTRA PERSONA VAYA MEZCLÁNDOSE CON NOSOTROS
EN NUESTRO INTERIOR, de manera que nuestra alma pase a obedecer las órdenes de
nuestro nuevo ruaj, y no del viejo, que estaba muerto a Yahweh y jamás pudo
hacer nada para obedecer o agradarle. Y continúa siendo así.
El pasuk es más que
claro: habla de SER LIBRADOS DE LA MALDICIÓN DE LA TORAH, NO DE SER LIBRADOS DE
LA TORAH. Si yo dirijo mi auto y paso un semáforo en rojo, recibiré una multa,
porque la Ley de Tránsito prohíbe pasar semáforos en rojo. Y cuando yo pague la
multa, QUEDARÉ LIBRE DE LA "MALDICIÓN" DE LA MULTA, NO DE LA LEY DE
TRÁNSITO. ¡Ciertamente no estaré siendo liberada para pasar semáforos en rojo de
ahora en adelante! La Ley continúa siendo la misma, pero ahora quedo liberada
de la multa (que si no es pagada en dinero, deberé ir presa) PARA PODER
CONTINUAR DIRIGIENDO CUMPLIENDO CON LA LEY. Es exactamente lo mismo que Yahshua
hizo con nosotros y la Torah, porque "la ley ciertamente es santa; y el
mandamiento es santo, justo y bueno" (Romaniyim 7:12). Ninguna parte de la
Torah ha sido abolida, al contrario: NOSOTROS ES QUE HEMOS SIDO CAPACITADOS
PARA CUMPLIRLA, y hacer esto es parte de nuestra santificación y negación del
yo.
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