PE02-01 - El Ruaj Humano Y El Ruaj HaKodesh 01

 

Regenerados En Nuestro Ruaj

 

Lo que ha nacido de la carne, carne es; y lo que ha nacido del ruaj, ruaj es. Yahanan 3:6

 

Elohim es ruaj; y es necesario que los que lo adoran, lo adoren en ruaj y en verdad. Yahanan 4:24

 

El ruaj mismo le da testimonio a nuestro ruaj de que somos hijos de Elohim. Romaniyim 8:16

Cuando un pecador se arrepiente, confiesa sus pecados, cree en el Adón Yahshua e invoca Su nombre, en ese mismo momento Mashiaj como Ruaj vivificante entra en la persona y se convierte en su nuevo hombre, trayendo un nuevo ruaj, como prometido:

 

Les daré otro corazón, y pondré un espíritu nuevo dentro de ellos. Quitaré del cuerpo de ellos el corazón de piedra y les daré un corazón de carne... Yahjezquel 11:19

 

Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Quitaré de su cuerpo el corazón de piedra y les daré un corazón de carne. Yahjezquel 36:26

 

Inmediatamente esa persona llega a estar viva, contenta y alegre. Ha habido un gran cambio en su vida. Este pecador ha sido salvo, ha sido re-generado, y ahora es un creyente.

 

Para experimentar la vida verdadera, sin duda debemos conocer a Elohim, al Adón, a Mashiaj, como Ruaj. También debemos saber que tenemos un ruaj dentro de nosotros con el cual podemos disfrutar a este Ruaj. Por lo tanto, el fundamento de la vida creyente es el Ruaj que está con nuestro ruaj.

 

Yahanan 3:6 dice "Lo que es nacido del Ruaj, ruaj es". El primer ruaj mencionado en este pasuk es el Ruaj de Elohim, y el segundo es nuestro ruaj. Esto significa que nuestro ruaj nace de Elohim el Ruaj. El nacimiento del ruaj en Yahanan 3:6 no se refiere al primer nacimiento, el nacimiento natural; sino al segundo nacimiento, el nacimiento espiritual. Todas las personas salvas han sido engendradas dos veces, y la segunda vez, DE LO ALTO. El primer nacimiento, de parte de nuestros padres, es el nacimiento en la carne, producido porque FUIMOS ENGENDRADOS EN LA CARNE, desde la carne, y somos hijos de Adam; el segundo nacimiento, de Elohim, es el nacimiento en nuestro ruaj, y se producirá en plenitud en breve, pero ya hemos sido gestados, engendrados de Mashíaj.

 

Otro pasuk precioso que habla de estos dos rujot es Yahanan 4:24. Este pasuk dice: Elohim es Ruaj; y los que le adoran, en ruaj y en verdad es necesario que adoren".

 

Aquí vemos otra vez que Elohim es Ruaj y que nosotros tenemos un ruaj. Si vamos a adorar a Elohim, debemos adorarle en nuestro ruaj. Como seres humanos, tenemos numerosos órganos: ojos para ver, oídos para oír, una boca para hablar y comer, una nariz para oler y respirar, manos para trabajar y pies para caminar. También tenemos varios órganos internos, incluyendo un estómago para contener y digerir la comida. Además de todos estos órganos, tenemos un ruaj con el que podemos adorar a Elohim.

 

El tercer pasuk que trata de los dos rujot es Romaniyim 8:16, el cual dice: El Ruaj mismo da testimonio juntamente con nuestro ruaj, de que somos hijos de Elohim". Aquí vemos que el Ruaj divino habla nuestro ruaj.

 

Todos debemos familiarizarnos en detalle con estos tres pasukim acerca de los dos rujot. Acuérdense que en Yahanan 3:6 nuestro ruaj nace del Ruaj; en Yahanan 4:24, nuestro ruaj adora al Ruaj; y en Romaniyim 8:16, el Ruaj da testimonio juntamente con nuestro ruaj. Estos tres pasukim prácticamente lo incluyen todo. En Yahanan 3:6 somos engendrados de lo alto, en Yahanan 4:24 comemos a Elohim y lo disfrutamos, y en Romaniyim 8:16 andamos con Elohim, vivimos por Elohim, y somos uno con Elohim en nuestro ser. Esta es la vida verdadera, el vivir del creyente.

 

 

 

 

El Ruaj Es Uno Con Nuestro Ruaj

 

Así también está escrito: el primer hombre Adam llegó a ser un ser viviente; y el último Adam, un ruaj vivificante. Qorintiyim Alef 15:45

 

Pero el que se une con el Adón, un sólo ruaj es. Qorintiyim Alef 6:17

 

Todos necesitamos ver que el hecho de que cuando creímos en Yahshua y fuimos bautizados en Él, eso significa que Él ha entrado en nosotros y nosotros hemos sido puestos en Él, de modo que Él y nosotros llegamos a ser uno. Él está en nosotros, y nosotros estamos en Él. Esto es posible solamente debido a los dos rujot. Él es el Ruaj divino, y nosotros tenemos un ruaj humano. El Ruaj divino está en nuestro ruaj humano. Por lo tanto, en nuestro ruaj somos un ruaj con Él.

 

Dentro de nosotros verdaderamente es un hecho que los dos rujot están mezclados como un ruaj.

 

Practicar El Ser Un Ruaj Con El Adón

 

La vida verdadera más elevada es una vida en la cual los dos rujot llegan a ser un ruaj. Esto va más allá de la ética y la moral. Hoy en día ustedes y yo no solamente tenemos una conciencia, el conocimiento innato del bien y la habilidad innata de hacer el bien. Tenemos un nuevo ruaj y también tenemos al Ruaj de Elohim, quien es nuestro Redentor y quien llegó a ser el Ruaj vivificante.

 

Hoy, quiero ayudarles a todos a que se ejerciten en la práctica de vivir por este ruaj mezclado, es decir, que practiquen el ser un ruaj con el Adón. El ser salvos sólo consiste en que a se les hayan perdonado sus pecados, que hayan sido lavados por la sangre, y que hayan sido redimidos y re-generados (engendrados de lo alto), pero a partir del momento en que somos salvos, que hemos entrado por la Puerta Estrecha, COMIENZA NUESTRO CAMINO DE SANTIFICACIÓN.

 

Mashiaj llegó a ser el Ruaj vivificante para ser la vida y la nutrición de vida en nuestro ruaj. Por lo tanto, debemos vivir en nuestro ruaj para experimentar la salvación y la abundante nutrición del Ruaj.

 

Para tocar a Elohim en el ruaj, algunas veces debemos detener las actividades de nuestro cuerpo y de nuestra alma, y entonces debemos clamar a Elohim e invocar al Adón Yahshua desde la parte más profunda de nuestro ser. Si hacemos esto, inmediatamente habrá luz dentro de nosotros. Siempre y cuando DETENGAMOS LAS ACTIVIDADES DE NUESTRO CUERPO Y DE NUESTRA ALMA, dejemos que el Ruaj obre en nosotros y le invoquemos desde nuestro ruaj: "¡Oh Yahweh Elohim! ¡Oh Adón Yahshua!". Entonces, en vez de encontrarnos en nuestras actividades externas, permaneceremos en nuestro ruaj, la parte más profunda de nuestro ser.

 

Las Escrituras dicen que Moshe nunca redujo su vigor en sus muchos años de vida. Eso fue debido a que vivió siempre en la presencia de Yahweh y se alimentó espiritualmente de Él todos los días. Si hacemos lo mismo, nosotros seremos nutridos, nuestro ruaj humano crecerá, Yahshua crecerá en nosotros, seremos formados a Su medida, y viviremos en salud por Su energía.

 

 

 

 

Comenzar El Día Invocando El Nombre Del Adón

 

Después de levantarnos por la mañana, todo lo que hagamos debe ser hecho en nuestro ruaj. Debemos comenzar nuestro día viviendo y andando en nuestro ruaj. Si nos levantamos de una manera inapropiada, echaremos a perder el día entero. Lo mejor que podemos hacer después de levantarnos es invocar el nombre del Adón. Cuando invocamos: "Oh Adón Yahshua", nos colocamos en el ruaj:

 

Nadie puede decir: "Adón Yahshúa" sino por el ruaj de santidad. Qorintiyim Alef 12:3b

 

Invocar de esta manera hace que dejemos todo lo demás y que regresemos a nuestro ruaj.

 

¿Cómo debemos invocar al Adón? Debemos invocarle de corazón puro:

 

Porque entonces haré a los pueblos puros de lenguaje, para que todos invoquen a Yahweh por nombre y le sirvan de común acuerdo. TsefanYah 3:9

 

Nuestro corazón, desde el cual invocamos al Adón, debe ser puro y debe buscar únicamente al Adón mismo. También debemos invocar con pureza de labios. Debemos tener cuidado con lo que hablamos, porque nada contamina más nuestros labios que las palabras ociosas. Si nuestros labios son impuros debido a que hablamos muy a la ligera, nos será difícil invocar al Adón.

 

Además, debemos invocar al Adón de manera corporativa:

 

Así que, huye de las pasiones juveniles y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz con los que de corazón puro invocan a Yahweh. Timotio Bet 2:22

 

Necesitamos reunirnos con el objetivo de invocar al Adón.

 

Finalmente, debemos invocarlo diariamente:

 

...te estoy llamando, Yahweh, todos los días extiendo mis manos hacia ti. Mizmor 88:9

 

Porque ha inclinado a mí su oído; por lo tanto, le invocaré en todos mis días. Mizmor 116:2

 

Mientras vivamos, debemos invocar el nombre del Adón.

 

 

La Razón Por La Cual Necesitamos Invocar El Nombre Del Adón

 

¿Por qué necesitamos invocar el nombre del Adón? Los hombres necesitan invocar el nombre del Adón para ser salvos:

 

Porque todo el que invoque el nombre de Yahweh se salvará. Romaniyim 10:13

 

Sin embargo, una vez que somos salvos, damos inicio a nuestro Camino de Santificación en Mashíaj, y si bien orar silenciosamente nos ayuda, invocar el nombre del Adón en voz alta nos llena de una manera más rica y completa.

 

Yo amo a Yahweh porque él oye mi voz, mis súplicas; porque vuelve a mí su oído siempre que clamo (...) e invoqué el nombre de Yahweh: "¡Oh Yahweh, salva mi vida!". (...) Levanto la copa de liberación e invoco el nombre de Yahweh (...) Sacrificaré una ofrenda de agradecimiento a ti e invocaré el nombre de Yahweh. Mizmor 116:2, 4, 13, 17

 

En este salmo se menciona cuatro veces el invocar al Adón. Como hemos visto anteriormente, la manera de sacar agua de las fuentes de la salvación es invocar el nombre del Adón (YeshaYah 12:2-4). Muchos creyentes nunca han invocado al Adón. Si ustedes nunca han invocado Su Nombre, ni tampoco han clamado gozosos ante el Adón, es poco probable que lo hayan disfrutado de una manera rica. Intenten exclamar ante Él, DERRAMARSE DE VERDAD. No tengan vergüenza de hacerlo delante de los demás, porque lo están haciendo PARA ÉL, y sí, para que el mundo sepa cuánto lo aman (sin tratar de llamar la atención falsamente, por supuesto). Si nunca han gritado expresando lo que significa el Adón para ustedes, inténtenlo. Cuanto más exclamen: "¡Oh Adón Yahshua, Tú eres tan bueno conmigo!", más se liberarán de su yo y más llenos serán del Adón. Miles de santos se han liberado y enriquecido al invocar el nombre del Adón, dejar de pensar en "cómo los ven" y simple, derramarse exaltados delante del Trono.

 

 

Otra razón por la cual necesitamos invocar al Adón es para ser rescatados de la angustia:

 

En mi angustia invoqué a Yahweh, le pedí auxilio a mi Elohim; y Él oyó mi voz desde su Templo; mi grito llegó hasta sus oídos. Mizmor 18:6

 

En la angustia clamé a Yah; y Yah me respondió y me dio alivio. Mizmor 118:5

 

Clama a mí en el día de angustia; yo te libraré y tú me honrarás. Mizmor 50:15

 

En aflicción clamaste y Yo te rescaté; Yo te escuché desde el lugar secreto de la tormenta, te probé en las aguas de Merivah. Mizmor 81:7

 

Pero clamé al Nombre de Yahweh: "¡Por favor Yahweh, salva mi alma!". Mizmor 116:4

 

Las personas que han argumentado en contra de invocar al Adón se han encontrado invocándolo cuando tenían algún problema o enfermedad. Cuando nuestras vidas están libres de problemas, podemos argumentar en contra de invocar al Adón. Pero cuando llegan los problemas, nadie tiene que decirnos que invoquemos Su nombre; ya que lo haremos espontáneamente. Si vemos que Él nos responde cuando estamos en las malas, ¿no será razón de más para clamar a Él en todo momento, aun cuando somos felices? Invocar su nombre, clamar a cada mañana nos llena de Su presencia. Esta es la forma de SER LLENOS DEL RUAJ HAKODESH.

Todos los sedientos, vengan a las aguas, aún si no tienen dinero, vengan, compren alimento y coman: compren alimento sin dinero, vino y leche sin costo. YeshaYah 55:1

 

 

 

 

Cuando Leemos Las Escrituras, Debemos Prepararnos Para Tener Comunión Con Elohim

 

Tomen también el casco de la salvación y la espada del ruaj, que es la palabra de Elohim, orando en todo tiempo en el ruaj con toda oración y ruego, vigilando con toda perseverancia y ruego por todos los consagrados. Efesiyim 6:17-18

 

El ruaj es el que da vida; la carne no aprovecha para nada. Las palabras que yo les he hablado son ruaj y son vida. Yahanan 6:63

 

Antes de leer las Escrituras, primero debemos prepararnos, porque no estamos leyendo el periódico o un libro secular, sino la Palabra de Elohim. Primero, debemos pedirle al Adón que nos limpie, que nos perdone nuestras transgresiones, que nos muestre las que no hemos visto y que nos ayude a corregirlas. Este es un proceso de PURIFICACIÓN, equivalente al lavado de las manos del sacerdote antes de entrar al templo. Nosotros no necesitamos lavarnos las manos ritualmente como los judíos insisten en hacer aún hoy, siguiendo costumbres de hombres. Nosotros ya hemos sido lavados de todos nuestros pecados cuando fuimos sepultados con Yahshua en Su muerte y recibimos el bautismo. Hoy, cada vez que nos presentamos a él sólo necesitamos LAVARNOS LOS PIES (limpiarnos de las transgresiones presentes en las que aún andamos)

 

Yahshúa le dijo: "El que se ha lavado no tiene necesidad de lavarse más que los pies, porque está todo limpio. Ya ustedes están limpios...". Yahanan 13:10

 

Debe quedar claro que este lavamiento es para PURIFICACIÓN, para acceder a la SANTIFICACIÓN que recibiremos al entrar en Su presencia, y no para salvación. Nosotros ya somos salvos. Y, aunque todos nuestros pecados ya fueron perdonados, debemos confesar todos los pecados ACTUALES en los que tropezamos en nuestro andar diario, para purificarnos y limpiarnos, de manera que no haya barreras entre nosotros y Elohim. Si hacemos esto, estaremos en comunión con Elohim. En aquel momento, estaremos en el Ruaj de Elohim, y cuando leamos las Escrituras, todo será diferente.

 

 

Recibir La Palabra Con Toda Oración

 

Luego, debemos orar-leer la Palabra; no sólo leerla. A través de los siglos, todos los que amaron al Adón y se entregaron al estudio de las Escrituras practicaron el orar-leer, aunque no le hayan dado este nombre. Algunos se refirieron a eso diciendo que debíamos leer las Escrituras en oración. Leer las Escrituras en oración equivale a orar-leer.

 

Nosotros enseñamos la práctica de orar-leer basándonos en Efesiyim:

 

Tomen también el casco de la salvación y la espada del ruaj, que es la palabra de Elohim, orando en todo tiempo en el ruaj con toda oración y ruego, vigilando con toda perseverancia y ruego por todos los consagrados. Efesiyim 6:17-18.

 

Shaúl tomaba (recibía) la Palabra de Elohim con toda oración y petición. Él no solamente oraba de una manera general, sino que también hacía peticiones de manera específica. La oración es general, mientras que la petición es específica. Por eso Shaúl oraba "con toda oración y ruego".

 

En primer lugar, cuando oremos-leamos no es necesario cerrar nuestros ojos; MANTENGÁMOSLOS FIJOS EN LA PALABRA MIENTRAS ORAMOS. En todos los libros de las Escrituras no he encontrado un sólo pasuk que diga que debemos cerrar nuestros ojos para orar, pero sí hay uno que dice que Yahshua LEVANTÓ LOS OJOS AL CIELO y habló con el Padre. Él elevó su mirada al cielo mientras oraba.

 

En segundo lugar, no es necesario componer o inventar nuestras oraciones. Sencillamente oren-lean la Palabra. Oren las palabras de las Escrituras tal y como están escritas. Con el tiempo, comprenderán que todas las Escrituras son un libro de oración. Abran la página de las Escrituras que están leyendo, y empiecen a orar usando esos pasajes de la Palabra.

 

CUANDO LAS PALABRAS SON SÓLO PALABRAS, ELLAS SON LETRAS IMPRESAS; NO SON EL RUAJ. PERO CUANDO LAS PALABRAS ENTRAN EN NUESTRA MENTE A TRAVÉS DE NUESTROS OJOS Y NOSOTROS COMENZAMOS A ORAR USANDO NUESTRO RUAJ, ELLAS LLEGAN A SER EL RUAJ. Y CUANDO LAS PALABRAS LLEGAN A SER EL RUAJ, ELLAS SON VIDA.

 

Cuando oramos lo que leemos en la Palabra, convertimos en oración los pasukim que leemos. Al orar, debemos olvidarnos de todo lo que no sea el Adón y Su Palabra. Esto significa que cuando buscamos al Adón, sólo tenemos una cosa en mente, Él llega a ser lo único que tenemos en nosotros. Y más no puede haber, porque su gloria es tan grande, que expulsa cualquier otro pensamiento.

 

 

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Publicado por: Anunciadora de Sión

SOY CREYENTE EN YAHSHUA, MIEMBRO DE LA NOVIA, ÓRGANO DEL CUERPO, CO-EDIFICADORA DEL REINO

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Lo que proviene del Ruaj pertenece al Cuerpo, porque el Ruaj no tiene Copyright.

Y si el hombre reivindica "derechos de autor", su mensaje proviene de la carne y no sirve.

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