Atlántida
Aunque celebrado como un reino de absoluta perfección,
ninguna de las personificaciones o hábitats míticos de Saturno se ajusta a nada
en nuestro mundo familiar. Sin embargo, una vez que uno busca la naturaleza
concreta de estas imágenes, queda claro que cada una se refiere a la misma
forma celestial. El tema es una configuración saturnina de sorprendente
sencillez, cuya aparición, transformación y eventual desaparición se convirtió
en el centro de todos los ritos antiguos.
La historia narrada por Platón de la isla de Atlántida que
gobernó África hasta la frontera de Egipto y Europa hasta Toscana en la
península de los Apeninos y que en una noche fatal fue destrozada por
terremotos y se hundió, nunca dejó de ocupar la imaginación de los literatos.
Estrabón y Plinio pensaron que la historia de la Atlántida era una ilusión del
anciano Platón. Pero hasta el día de hoy, la tradición, revivida por Platón, no
ha muerto. Los poetas y novelistas han explotado la historia libremente; los
científicos lo han hecho con precaución. Aunque Platón dijo claramente que la
Atlántida estaba situada detrás de las Columnas de Hércules (Gibraltar), en el
Océano Atlántico, como también lo indica el nombre de la isla, los viajeros y
otros adivinos han colocado la Atlántida en todas partes del mundo, incluso en
tierra seca, como, por ejemplo, en Túnez, Palestina, y Sudamérica. También se
han considerado Ceilán, Terranova y Spitzbergen. Esto se debió al hecho de que
existen tradiciones de inundaciones e inmersión de islas en todas partes del
mundo.
Platón dejó constancia de lo que Solón había oído en Egipto
del sabio sacerdote.
"El océano (Atlántico) era navegable en ese momento; porque frente a la boca que ustedes los griegos llaman, como dicen, "los pilares de Hércules", había una isla que era más grande que Libia y Asia (Asia Menor) juntos; y era posible para los viajeros de esa época cruzar de ella a las otras islas, y de las islas a todo el continente frente a ellas, que abarca ese verdadero océano... Allá es un océano real, y la tierra que la rodea puede ser llamada con toda razón, en el sentido más completo y verdadero, un continente. Ahora, en esta isla de Atlántida existía una confederación de reyes, un poder grande y maravilloso, que dominaba toda la isla, y sobre muchas otras islas también y partes del continente y, además, de las tierras aquí dentro del Estrecho gobernaron sobre Libia hasta Egipto, y sobre Europa hasta Toscana".
Platón, Timeo
En el siglo XIX los barcos navegaban por el Océano Atlántico
para explorar su lecho en busca de la Atlántida, y antes de la Segunda Guerra
Mundial existían sociedades científicas con el único propósito de explorar el
problema de la isla hundida. La "ciencia" actual lo ha relegado al
cajón de las leyendas y mitos impropios de ser explorados... Y LO QUE LA
HUMANIDAD CIEGA Y NECIA NO SABE ES QUE TODO LO QUE ES "OFICIALMENTE
RIDICULARIZADO" ES "SECUESTRADO" PARA SER INVESTIGADO EN
PRIVADO... porque ellos buscan los beneficios en todas las cosas, y buscan
también recuperar este mundo perdido.
La Atlántida puede muy bien haber existido en la nueva
humanidad, entre la re-creación y el diluvio de Nóaj muy probablemente, PERO SI
EXISTIÓ AQUÍ UNA CIVILIZACIÓN CON ESTE NOMBRE, NO FUE LA ORIGINAL. Vamos a
entender por qué digo estas cosas a medida que avanzamos, pero precisamente
porque veremos cómo estas cosas se repiten una y otra vez en todas partes, pero
una son aprobadas y otras no por Yahweh, necesitamos ver QUÉ LAS DISTINGUE. El
asunto es muy complejo y difícil de analizar, no pretendan levantar respuestas
en mitad del camino, porque necesitamos todas las piezas para poder montar el
rompecabezas completo. Este es EL ROMPECABEZAS DE LA HUMANIDAD. No vamos a
resolverlo en dos charlas.
Se ofreció mucha especulación, no solo sobre el paradero de
Atlantis, sino también sobre los logros culturales de sus habitantes. Platón,
en otra obra suya (Critias), escribió un tratado político, y como ningún lugar
real del mundo podría haber sido el escenario de su utopía, eligió para eso la
isla hundida. Los estudiosos modernos, al encontrar cierta afinidad entre las
culturas estadounidense, egipcia y fenicia, piensan que la Atlántida puede
haber sido el vínculo intermedio (vean bien cuáles son nombradas, porque a
través de ellas pasa el conglomerado de las "señales Illuminati",
aunque no fueron los únicos en perseguir estas cosas, los nazi también las
buscaron, y muchos otros). Hay mucha probabilidad en estas especulaciones.
Aquí viene un punto interesante, y que nos ayudará a
entender muchas cosas. Platón dijo que Solón le contó la historia a Critias el
mayor, y que el joven Critias, amigo de Platón, la escuchó de su abuelo cuando
tenía diez años. Critias el más joven recordó que le habían dicho que la
catástrofe que sobrevino a la Atlántida ocurrió 9000 años antes. A pesar de que
ciertos autores han asegurado que "Hay un cero de más aquí", yo no
creo que así sea. No se han "agrandado" los recuerdos, PERO
CIERTAMENTE SE HAN MEZCLADO LAS COSAS. Probablemente ya estuvieran mezcladas en
el conocimiento de Critias el mayor, o bien que el nieto, al ser tan joven
cuando oyó de esas cosas, terminó unificándolas, ya que eran DEMASIADO
SIMILARES. La humanidad las ha unificado, así como se han mezclado los
diluvios, como ya estudiamos, "diluvios" que no fueron tales, sino
grandes inundaciones, como el de Ogyges, que fue mezclado con el de Deucalión
(Deucalión es una figura semejante a Noaj).
De lo que hablamos es de que, antes de que la tierra quedara
'desordenada y vacía", hubo una gran civilización, una Era de Oro real y
verdadera, en la que el Adam-Elohim original, creado a imagen y semejanza de
Elohim gobernaba en representación de Su Creador. Esto fue ANTES DE TODAS LAS
CAÍDAS.
¿Fue el hombre realmente hecho un poco menor que los malajim
(elohim) EN LA PRIMERA CREACIÓN? No parece haber sido así, ya hemos estudiado
acerca de una doble creación del hombre que aparece en las Escrituras, en
Bereshit 1 (y 5) y el capítulo 2. En la primera creación el hombre es hecho
"a imagen y semejanza" de Elohim, pero en la segunda él es formado
del polvo de la tierra, y dividido en hombre y mujer. De manera que el Adam
original era un ser como los malajim y aún superior, probablemente, de manera
que tenía realmente CUALIDADES SOBREHUMANAS... sobrehumanas a la humanidad
actual. No sólo no moría, sino que no tenía deterioro físico.
Este reino era perfecto en todos los sentidos, y la paz y la
prosperidad reinaban en toda la tierra. No había necesidad de trabajar (que es
un castigo instituido en la caída del hombre en Bereshit 3) y en general, si
nos atenemos a las antiguas descripciones, los hombres tenían largas y buenas
vidas, y vivían a la luz de Su Creador... hasta que el Adam-Elohim reclamó para
sí el derecho de "hacerse pasar por" el Creador.
Esto, que no es un mito sino una historia demasiado lejana,
es la base de las historias de todas las civilizaciones del mundo, lo cual es
demasiado (junto con tantas otras "casualidades") como para atribuir
esto a la copia de ideas. Esta Atlántida ha sido el sueño de todas estas
civilizaciones, y veremos que en verdad tenemos la promesa del Padre de que
ciertamente regresaremos a ella... A LA
VERDADERA, SIN USURPADORES.
El Fin De La Era Dorada
El dominio de Saturno en algún período remoto de la historia
de la vida de los pueblos de la Tierra fue de un carácter tan pronunciado y
omnipresente que surge la pregunta de si las aventuras del planeta atravesando
muchas hazañas podrían ser por sí mismas la causa completa de la adoración del
planeta y el nombramiento de la Edad de Oro "la Edad de Cronos"
(Saturno). Saturno explotó y provocó que la Tierra pasara por la mayor de sus
catástrofes históricas, pero parece que la Era de Saturno es un nombre para la
época anterior al diluvio; después del Diluvio, Saturno, desmembrado, casi dejó
de existir como cuerpo planetario y cuando finalmente fue reconstituido quedó
encadenado por anillos, y estuvo lejos de ser el cuerpo celeste dominante que
le correspondería como la deidad suprema de la época. La "Era de
Cronos" fue (supuestamente, al menos desde el punto de vista humano) una
época tan gloriosa que es difícil pensar en relacionarla con el período
posterior al Diluvio. El llanto por Adonis, Tamuz de los babilonios, u Osiris
de los egipcios, deploró el final de su dominio, no su comienzo. Todas las
naciones continuaron, después del diluvio, llorando por una época perdida que
nunca conocieron, pero que de alguna manera les fue transmitida. Según lo que
vemos después del diluvio, cómo en poco tiempo la tierra se convirtió en Bavel,
sabemos que aunque Nóaj fue hallado justo, no todos sus hijos lo fueron, ni el
resto de su descendencia.
La Leyenda De Los
Hijos De Lémej Y Los Pilares
En el Manuscrito Dowland del Siglo XVI se dice: "La Biblia relata,
en el cuarto capítulo del Génesis, que antes del Diluvio de Noé había un hombre
llamado Lamec y que este hombre tuvo dos esposas, una llamada Adá y otra
llamada Silá. Adá engendró dos hijos varones, Yabal y Yubal, y su segunda
esposa Silá un varón y una mujer. Estos cuatro hijos fundaron todas las
ciencias del mundo. El hijo mayor Yabal fundó la ciencia de la Geometría, llenó
los campos con rebaños de ovejas y corderos y fue el primero en construir una
casa de piedra y madera. Su hermano Yubal fundó la ciencia de la Música, el
canto, el arpa y el órgano. El tercero de los hermanos, Tubal-Caín fundó el
oficio de la herrería con oro, plata, cobre, hierro y acero; y la hija fundó el
oficio de Tejer. Y como sabían que Dios se tomaría su venganza por el pecado,
ya fuese por fuego o por agua, escribieron su conocimiento en dos pilares de
piedra para que pudiera ser encontrado después del Diluvio de Noé. Uno era de
mármol, para que no pudiese ser destruido por el fuego y el otro de latastro
para que no pudiese ser disuelto por las aguas".
Herbert Ore, Tubalcain
Josefo también menciona esta leyenda:
Y, siendo todos ellos de buena condición, habitaron tranquilos y felices las mismas tierras, sin que hasta el momento de la muerte les aconteciera nada desagradable, e inventaron la ciencia relativa a los cuerpos celestes y a su regulación. Y con el fin de que no escaparan a los hombres estos descubrimientos ni se perdieran antes de ser conocidos, al advertirles Adán que tendría lugar la desaparición de todo rastro de vida, en un caso por efecto del fuego y en otro por la fuerza y abundancia de agua, levantaron dos columnas, una de adobe y otra de piedras, y en ambas escribieron los descubrimientos, para que, incluso desaparecida la de adobe por el diluvio, permaneciera la de piedra y permitiera a los hombres conocer el texto de la inscripción, además de señalar que habían erigido también otra columna de adobe. Y permanece hasta el día de hoy en la región de Siris.
Flavio Josefo, Antigüedades Judías, 67.
Es decir, esa gente sabía que el diluvio estaba llegando.
Por supuesto, no hablamos de los simples y necios de la masa sino de los más
inteligentes. A pesar de eso, no sólo no se arrepintieron, sino que forjaron
una manera de dejar sus amados conocimientos a los que vinieran en el futuro.
Sobre estas dos columnas se fundan las leyendas de la masonería: estas son las
dos columnas que aparecen en todas sus imágenes y que descaradamente Shlomó
incluyó en el diseño del Templo:
Al frente de la Casa hizo dos columnas de treinta y cinco codos de
alto; los capiteles de encima de ellas medían cinco codos de alto. Hizo
cadenillas en el Santuario interior y las puso en la parte superior de las
columnas; hizo cien granadas y las puso en las cadenillas. Erigió las columnas
delante del Gran Salón, una a su derecha y otra a su izquierda; a la de la
derecha la llamó Yakhín, y a la de la izquierda, Bóaz. Dibrey ha Yamim Bet
3:15-17
En las columnas antes mencionadas se supone que fue registrado
todo el conocimiento prediluviano. Lo interesante es que hay dos corrientes
completamente opuestas que reivindican el hallazgo de las mismas: unos son los
gnósticos, y otros... los judíos. El Sefer Yobelim menciona este hallazgo:
En el jubileo vigésimo nono, en el primer septenario, a su comienzo,
tomó Arfaxad por esposa una mujer llamada Rasuaya, hija de Susán, hija de Elam,
y le parió un hijo en el tercer año de este septenario, al que puso por nombre
Kainam. El niño creció, su padre le enseñó la escritura, y fue a buscarse lugar
donde hacerse una ciudad. Halló antiguas escrituras grabadas en la roca, cuyo
contenido leyó y tradujo, y con ellas se extravió, porque allí estaban las
enseñanzas de los custodios, en las que explicaban la adivinación por el sol,
la luna y las estrellas de todas las constelaciones del cielo. Y lo escribió,
pero no habló de ello, porque temió mencionarlo a Noaj, no se enojara con él
por este motivo.
Sefer Yobelim 8.1-4
Arfaxad es el tercer hijo de Shem. Este Kainam no aparece en
los linajes de las Escrituras, sin embargo, sí aparece Sela (que será
mencionado en el mismo capítulo del Sefer Yobelim un poco más adelante), aunque
como hijo de Kainam y no de Arfaxad como mencionan las Escrituras. Como no es
la primera vez que se eliminan o saltean personas en las listas de linajes,
sobre todo cuando han hecho cosas negativas, podemos tener en cuenta el asunto.
Lo interesante aquí es que tenemos un libro de origen hebreo
que registra el hallazgo del antiguo conocimiento perdido por parte de
descendientes de Shem, después del diluvio. Ya la masonería atribuye el triunfo
a su Hermes Trismegisto, a quien gracias a estos conocimientos atribuyeron la
invención de las letras, así como de todas las ciencias, y lo estimaban como el
fundador de sus ritos religiosos.
Manetón, el sacerdote egipcio, citado por Syncellus, distingue a tres seres a quienes los egipcios llamaron Hermes. El primero, o Hermes Trismegisto, antes del diluvio, había inscrito la historia de todas las ciencias sobre pilares; el segundo, el hijo de Agathodemon, tradujo los preceptos del primero; y el tercero, que se supone que es sinónimo de Thoth, fue el consejero de Osiris e Isis. Pero estos tres fueron confundidos y fusionados en una época, conocido como Hermes Trismegistus. Los filósofos lo comprendieron siempre para simbolizar el nacimiento, el progreso y la perfección de las ciencias humanas. Él fue así considerado como un tipo del Ser Supremo. A través de él el hombre fue elevado y puesto en comunicación con los dioses.
Albert G. Mackey - La Historia de la Masonería, Capítulo X, La Leyenda De Hermes
En cierta forma, por estas dos supuestas ramas podemos
comprender cómo y por qué hoy encontramos tantas "denominaciones"
(igualito que en el cristianismo) que reivindican los mismos logros pero
cambiando los personajes, y se acusan unos a otros. Por ejemplo, la Kabalah
sería un derivado de estas antiguas artes, redescubierta por los judíos ya
desde antes del exilio (uno de los motivos incluiría estas prácticas secretas),
reafianzado en Bavel y cristalizado en la Edad Media con el Zohar y en el
misticismo de Isaac Luria. En este sentido, sus practicantes reivindican el
"antiguo conocimiento heredado", bajo diferentes formatos históricos,
pero siempre proveniente de los cielos. Claro, la mayor parte del mundo está
convencida que, siendo Yahweh el Elohim del Tanaj, ÉL DEBE ESTAR DE ACUERDO CON
TODA PRÁCTICA JUDÍA, demostrando la gran ignorancia a este respecto. Esto
incluye a la gran mayoría de los creyentes, lamentablemente.
Pero por otro lado, como ya mencioné también se utiliza esta
relación Dios-hombre (en cuanto a insistir en que estas ciencias vinieron del
cielo, sin comprender que no es lo mismo el Creador que los caídos) para
"espiritualizar" prácticamente todas las ramas de la masonería:
Albert G. Mackey, en "La Historia de la
Masonería", nos cuenta:
Los descendientes de Noé ejercieron su habilidad en la Masonería en el intento de erección de la Torre de Babel, pero fueron confundidos en su discurso y dispersados en varios países, por lo cual el conocimiento de la Masonería se perdió. Sin embargo, fue preservado en Shinar y Asiria, donde Nimrod construyó muchas ciudades.
En aquellas partes florecieron luego muchos sacerdotes y matemáticos bajo el nombre de Caldeos y Magos, quienes preservaron la ciencia de la Geometría o la Masonería, y de allí la ciencia y el arte fueron transmitidos a épocas posteriores y climas distantes. Mitzraim, el segundo hijo de Ham, llevó la Masonería a Egipto, donde el desbordamiento de las orillas del Nilo fue mejorado con la aplicación de la Geometría, y en consecuencia hizo que el mundo requiriera los servicios de la Masonería.
La masonería fue introducida en la tierra de Canaán por los descendientes del hijo más joven de Ham, y en Europa, como se supone, por la posteridad de Jafet, aunque no sabemos nada de sus obras.
La posteridad de Sem también cultivó el arte de la Masonería, y Abraham, el jefe de una rama de esa familia, habiendo obtenido así su conocimiento de Geometría y las ciencias afines, comunicó ese conocimiento a los egipcios y lo transmitió a sus descendientes, los israelitas. Cuando, por lo tanto, hicieron su éxodo de Egipto, los israelitas fueron "un reino completo de masones", y mientras que en el desierto a menudo fueron reunidos por su Gran Maestro Moisés en "una Logia regular y general".
Al apoderarse de Canaán, los israelitas descubrieron que los antiguos
habitantes estaban versados en la masonería, que, sin embargo, sus
conquistadores mejoraron enormemente, ya que el esplendor de las mejores
estructuras de Tiro y Sidón fue superado por la magnificencia del templo
erigido por el rey Salomón en Jerusalén. En la construcción de este edificio,
Salomón fue asistido por los masones y carpinteros de Hiram, rey de Tiro, y
especialmente por el nombre del rey de Tiro Hiram o Huram, a quien, en una
nota, Anderson le da el nombre de Hiram Abif, nombre que ha conservado desde
entonces entre los masones".
Aquí vemos cómo la masonería ha intentado desde siempre
apropiarse de personajes como Avraham, Moshe, los israelitas en general, Shlomó
(este sí se relacionó por su cuenta). Esto es entonces desde el comienzo la
serpiente ha intentado levantar un templo que compitiera con el templo de
Yahweh, la Nueva Yahrushalayim. Puesto que haSatán falló en su tentativa de
elevarse hasta el trono de Yahweh y fue condenado a la tierra, decidió que
levantaría aquí su copia.
Saturno y Júpiter, Cronos y Zeus
Entonces, ¿por qué Saturno fue la deidad suprema con cuyo
nombre la gran y gloriosa era antes del Diluvio fue nombrada? ¿Por qué quitó a
Urano de su papel de deidad principal y, para los espectadores de la Tierra, lo
castró? ¿Serán estos acontecimientos completamente desconocidos (Saturno
castrando a Urano, el cielo) las causas de una catástrofe anterior que dejó a
la tierra "desordenada y vacía"? Si las distancias entre la Tierra y
Saturno fueran las que son ahora, entonces tales sucesos apenas habrían podido
ser observables. Saturno es claramente visible, pero no es, a simple vista, un
espectáculo en el cielo; sin embargo, era mucho más notable y luminoso antes
del Diluvio. Con todo, no vamos a tratar a Saturno como "planeta".
Vamos a presentar algunas teorías diferentes pero sumamente explicativas.
Cuando Saturno dejó
el mundo, la Edad de Oro terminó catastróficamente. Esta es la historia
universal del dios moribundo, el "primer rey" derrocado o el
"primer hombre" caído. Ya sea traicionado por una fuerza oscura, o
castigado por un pecado, o afligido por la vejez, cansado de la humanidad, el
resultado es el mismo: la corrupción de la naturaleza y un empeoramiento
progresivo de la condición humana. Como ya vimos, las condiciones de vida
fueron rebajadas después del diluvio. La historia es el primer, y casi se
podría decir único, tema de la tragedia y el drama en la antigüedad: la Edad de
Oro de Saturno llegó a un final repentino y catastrófico, causado por la caída
del gran dios, la destrucción del sistema conocido y la expulsión de Saturno.
Que el distante
planeta Saturno debería estar en el centro de los ritos antiguos es un hecho
que la sabiduría convencional no explicará fácilmente. Uno busca en vano alguna
característica de Saturno, el planeta actual, que pudiera explicar a Saturno,
el dios primigenio, el titán TAN ODIADO POR LOS DIOSES PERO AMADO POR LOS
HOMBRES. No olvidemos que la rebelión fue provocada por los "hijos"
de Saturno, no por los hombres sobre la tierra. Para los hombres, la edad de
Saturno fue una Edad de Oro, pero según el punto de vista de Zeus y sus
hermanos, ERA UNA PRISIÓN. ¿De qué manera podría Saturno haber mantenido
"prisioneros" a sus hijos?
Analicemos un poco la mitología. En el antiguo mito
registrado por Hesíodo en su Teogonía, Cronos odiaba a su padre Urano, porque
éste retenía en el seno de su madre Gea a Cronos y los demás Titanes, y no
permitía que vieran la luz. Gea creó una gran hoz de pedernal y reunió a Cronos
y sus hermanos para convencerlos de que matasen a Urano. Cuando Urano se
encontró con Gea, Cronos lo atacó con la hoz y lo castró. Por esto, Urano juró venganza y llamó a sus hijos titanes (según Hesíodo "los que abusan") por exceder sus límites y osar cometer tal acto.
Tras derrotar a Urano, Crono volvió a encerrar en el Tártaro a sus hermanos, y
se convirtió en un tirano como su padre. Subió al trono junto a su hermana Rea
como reyes de los dioses. Esta época del reinado de Crono se denominó la edad
dorada, pues la gente de entonces no necesitaba leyes ni reglas: todos hacían
lo correcto y no existía la inmoralidad (dicen).
Crono supo de Gea que estaba destinado a ser derrocado por
uno de sus propios hijos, como él había derrotado a su padre. Por eso, aunque
fue padre con Rea de los dioses Deméter, Hera, Hades, Hestia y Poseidón, se los
tragaba tan pronto como nacían. Cuando iba a nacer su sexto hijo, Zeus, Rea
pidió a Gea que pensara un plan para salvarlos y que así finalmente Crono
tuviese el justo castigo a sus actos contra su padre y sus propios hijos. Rea
dio a luz en secreto a Zeus en la isla de Creta y entregó a Crono una piedra
envuelta en pañales, también conocida como Ónfalos, que este tragó enseguida
sin desconfiar, creyendo que era su hijo. Rea mantuvo oculto a Zeus, Gea lo
crió según algunas versiones, y cuando creció, Zeus usó un veneno que le dio
Gea para obligar a Crono a regurgitar el contenido de su estómago en orden
inverso: primero la piedra, que se la dejó a Pitón bajo las cañadas del Parnaso
como señal a los hombres mortales, y después al resto de sus hermanos.
Zeus liberó a los titanes y hubo una gran guerra, la
Titanomaquia, en la que Crono fue derrotado. Después de esto, Zeus volvió a
encarcelar a la mayoría de los titanes (todos volvían a guardarlos en las
entrañas de la tierra, lo que significa que la tierra se calmaba de sus
convulsiones y cataclismos). Más tarde, Gea engendró al monstruo Tifón para
vengar a los encarcelados Titanes, pero Zeus terminaría venciéndolo, esto mucho
más adelante, como ya veremos.
Esta es la interpretación griega de toda una serie de
catástrofes que trajeron notables cambios en la tierra... y también en los
cielos. Lo curioso de la adoración a Saturno como figura central en los cielos,
nos lleva a preguntarnos: ¿Podría la actual mota de luz que es para nosotros
Saturno en los cielos, haber provocado el antiguo recuerdo de un Creador parado
solo en el medio de los cielos?
Si, como se cree casi
universalmente, los cielos no han experimentado cambios importantes en tiempos
astronómicamente recientes, entonces el mito —por muy meticulosamente
desarrollado que sea— sólo puede ser una invención, producida a través del más
puro desprecio por la observación y la experiencia reales. No les pido que
ignoren esta posibilidad, pero dado que este mito es mundial, dificulta la idea
de una imaginación tan creativa por un lado como para inventar mitos tan
grandiosos, y tan monótona y repetitiva por el otro, como para repetirlos, con
modificaciones secundarias, EN TODAS LAS CIVILIZACIONES.
Cualesquiera que sean
los verdaderos orígenes del mito, para los antiguos constituía una visión convincente,
una visión que merecía un estudio cuidadoso por parte de todos los estudiantes
de historia, religión y mitología.
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