29 de diciembre de 2021

CLE01-58 - La Religión Del Linaje Antimashíaj 02

 


Vida, Muerte Y Resurrección... ¿De Yahshua O De Atis?

 

Se cuenta que Atis inicialmente era un héroe local en Frigia, con estabilidad en el gran centro comercial de frigio de Pessinos, ubicado en las colinas del monte Agdistis. Fue una deidad representativa de la vida muerte y resurrección.

 

A esta deidad también se le conoce como Atys o Córibas, según la leyenda éste era amante de Cibeles. Se dice que él inicialmente fue un semidiós local venerado en Frigia. Se encontraba ubicado en las colinas del monte Agdistis.

 

La gran montaña era personificada como un Daimon y sus visitantes la emparentaban con la Gran Madre Cibeles.

 

La veneración hacia Atis empezó alrededor del siglo 1200 a.C en el monte Díndimo, actualmente es conocido como Murat Dağı en Gediz, Kütahya. El culto a Atis se reforzó en el siglo IV, los griegos en esta época le rendían tributo constantemente.

 

La leyenda de sus orígenes en Agdistis fue inicialmente registrada por el viajero Pausanias. Se comenta que el daemon Agdistis tenía rasgos tanto femeninos como masculinos. Es por eso que los dioses del Olimpo estaban temerosos de Agdistis, así que deciden cortarle el órgano masculino y arrojarlo al piso, de allí crece un almendro.

 

NOTA: Un demon, daimon o daimón (en griego, δαίμων) es un concepto de la mitología y la religión griegas cuyo significado puede ser diferente según el contexto en el que aparece. En los textos de Homero habitualmente tenía el significado de una divinidad indeterminada; cuando se aplicaba a la vida del hombre, equivalía a la fortuna, la suerte, un genio protector, el destino o la fatalidad. PARA HESÍODO LOS HOMBRES DE LA EDAD DE ORO SE HABÍAN CONVERTIDO POR VOLUNTAD DE ZEUS EN DÉMONES QUE PROTEGÍAN A LOS MORTALES. Los pitagóricos distinguían entre dioses, démones, héroes y hombres y, más tarde, Platón, en El banquete, definió un demon como un ser intermedio entre los mortales e inmortales, puesto que debía transmitir los asuntos humanos a los dioses y los asuntos divinos a los hombres. Dentro de esta concepción platónica, LAS PRINCIPALES FUNCIONES DE LOS DÉMONES ERAN SERVIR DE GUÍAS A LOS HOMBRES A LO LARGO DE SU VIDA y de conducirlos al Hades en el momento de la muerte.

 

Cuando los frutos de éste maduraron, la bella ninfa Nana hija del dios río Sangarios, tomó uno de los frutos y lo acurrucó en su regazo. En ese instante el fruto desapareció y ella quedó embarazada. Al pasar el tiempo nació el pequeño Atis y Nana lo dejo abandonado en las faldas de la montaña.

 

El pequeño fue criado y cuidado por un buen carnero. Cuando el pequeño creció se convirtió en un apuesto joven de cabellos largos, Agdistis diosa madre frigia se enamoró de él y se transformó en Cibeles. Los padres adoptivos de Atis lo remitieron a Pesino allí debía casarse con la hija del rey, algunas versiones dicen que esta joven era Midas.

 

 

El Lamento De Cibeles

 

Al momento del canto matrimonial, Agdistis-Cibeles apareció muy celosa y Atis perdió la cordura y se cortó sus genitales. El rey, padre de Midas también se mutiló. Agdistis se lamentó por el acto y se cercioró que el cuerpo de Atis no se descompusiera.

 

La diosa declaró un ritual anual en su homenaje, también recalcó que todos sus sacerdotes debían ser eunucos. A estos sacerdotes se les conocía en Roma como galos.

 

Hay otra versión muy distinta, se dice que Atis pudo sobrevivir a su autocastración y fue así como se convirtió en fiel sacerdote de Cibeles. El joven más tarde tuvo remordimiento de consciencia por haberse quitado el miembro y ser casi una mujer esclavo de la diosa en los bosques de Frigia.

 

Luego de su trágica muerte, éste renació como un pino muy colorido. Su renacimiento era celebrado el 25 del mes de marzo, era conocido como el festival de Hilaria.

 

Otras fuentes dicen que las fiestas en su homenaje se celebran desde el 15 hasta el 27 de marzo. Allí se recrean actividades para que siempre sea recordado, de allí viene el lema de nacimiento, castración, muerte y resurrección.

 

 

Diferencias Y Similitudes Entre El Mito De Atis Y El Relato Del Evangelio

 

Un aspecto que cabe destacar es que no se realiza ninguna oferta de salvación en este mito. La muerte de Atis es trágica, pero eso es todo, un final trágico. Su muerte no redime a nadie de sus pecados. En una de las versiones del mito, cuando Atis muere crecen flores por donde fluye su sangre, pero su sangre no parece afectar a nadie que no esté interesado en las flores.

 

Atis era también un dios de la vegetación, y la conexión entre su muerte y un árbol fue concebida para simbolizar el ciclo por el cual la vegetación se reduce en los meses de otoño e invierno y regresa en la primavera. Este simbolismo no aparece en los evangelios, donde Yahshua muere sólo una vez y resucita sólo una vez.

 

No obstante, no podemos dejar de sonreír ante la "casualidad" de que el mito de un dios que muere y resucita sea casualmente celebrado dentro de la cuaresma, poco antes de que los católicos celebren su Pascua, muerte y resurrección de su "Jesús" incluida. Se trata evidentemente de uno más de tantos paganismos que la Iglesia Católico incorporó, "lavándole la cara", y disfrazando a Atis de "Jesús", para atraer a los paganos a la conversión.

 

 

 

 

No hay razón para creer que Semíramis sea la única que edificó las murallas almenadas de Bavel. Tenemos el testimonio expreso del antiguo historiador Megástenes, conservado por Abideno, de que fue Belo el que "rodeó a Bavel con una muralla". Como fue "Bel", el que confunde, quien empezó la edificación de la ciudad y de la torre de Bavel, pero tuvo que dejarlas inconclusas, esto no podía referirse a él. Podría solamente referirse a su hijo Nino, quien heredó el título de su padre, y que fue ciertamente el primer rey del imperio babilónico, siendo, por lo tanto, el mismo Nimrod. La razón para que a Semíramis, la esposa de Nino/Nimrod, se le atribuyera la gloria de terminar las fortificaciones de Bavel, fue porque ella se ganó el aprecio de los idólatras para mantener una posición preponderante, por lo cual le atribuyeron a ella todos los caracteres distintivos que, se supone, pertenecían a su esposo.

 

Entonces, habiendo averiguado uno de los caracteres por el cual fue adorada la esposa deificada, podemos concluir por esto que ese fue el carácter correspondiente al esposo deificado. El hijo-amante de Cibeles, como ya relatamos, resume la historia de Semíramis, de quien se dice era la original esposa de Cush/Bel, pero que lo dejaría (no sabemos si por muerte o qué) de lado y se casaría con su propio hijo, Nimrod. Esta historia cíclica de madre-esposa e hijo-amante colabora para aumentar la confusión entre los personajes, pero para ellos constituye de gran ayuda, ya que cualquiera puede asumir cualquier papel.

 

Layard da a conocer claramente su creencia de que Rea o Cibeles, la diosa de la "corona de torre", fue solamente la réplica femenina o consorte de la "deidad que presidía sobre los baluartes o fortalezas"; y de que esta deidad fue Nino o Nimrod, tenemos todavía más evidencia de la que dan las dispersas noticias de la antigüedad sobre el primer rey deificado de Bavel, bajo un nombre que lo identifica como el esposo de Rea, la diosa que "lleva la torre". Ese nombre es Cronos o Saturno. Es bien sabido que Cronos o Saturno fue el esposo de Rea, pero no se sabe bien quién fue Cronos.

 

Teófilo de Antioquía demuestra que Cronos fue adorado en el oriente bajo los nombres de Bel y Bal; y por Eusebio tenemos noticia del primero de los reyes asirios, cuyo nombre era Belo, que también fue llamado Cronos por los asirios. Como los escritos originales de Eusebio no admiten a ningún Belo como rey verdadero de Asiria anterior a Nino, rey de los babilonios, y lo diferencia de él, esto demuestra que Nino, el primer rey de Bavel, fue Cronos. ¿Cómo pasaría Cush a transformarse en Nimrod? Simple, porque así lo deciden, el hijo que mata al padre (es probable que este haya sido el fin de Cush, en manos de su propio hijo) y se casa con su madre, reemplazando al muerto y asumiendo sus poderes y características.

 

Por tanto, si Rea, que es identificada con Cibeles, fue la diosa de las fortificaciones, Cronos o Saturno, el esposo de Rea, es decir, Nino o Nimrod, el primer rey de Bavel, debe haber sido Eloha Mahozín, "el dios de las fortalezas" que se menciona en Daniyel, refiriéndose al Antimashíaj:

 

Más bien honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio. Daniyel 11:38

 

Esta es la clara entronización de la falsa religión babilónica, que "se hace igual a Elohim". Es el pináculo de la carrera de haSatán, y de sus hijos dilectos, Qayin y Nimrod.

 

Hislop añade:

 

"Si el niño debía ser adorado, mucho más la madre. Y, en realidad, la madre se convirtió en el objeto de culto favorito. Para justificar este culto, la madre fue elevada al nivel de la divinidad juntamente con su hijo, y era considerada como la que estaba destinada a herir la cabeza de la serpiente... La Iglesia Católica Romana mantiene que no fue tanto la simiente de la mujer como la mujer misma que heriría la cabeza de la serpiente. Oponiéndose a toda regla de gramática, traduce la denuncia divina contra la serpiente como sigue: "Ella te herirá la cabeza, y tú la herirás a ella en el calcañar". Lo mismo sostenían los antiguos babilonios y así lo representaban en sus templos [y también hoy en el libro El Trueno de la Justicia, un libro católico mariano, y en general la iglesia católica, que asegura que quien pisará la cabeza de la serpiente es ELLA, y no el Hijo].

 

"Con el correr del tiempo, según iban perdiéndose de vista los hechos relativos a la historia de Semíramis, se declaró audazmente que el nacimiento de su hijo había sido milagroso y, por lo tanto, ella fue denominada 'Alma Mater'", según explica Hislop en una nota al pie en la página 76.

 

En los diversos países donde se extendió este culto, la madre y el hijo eran llamados de diferentes nombres debido a la división de los lenguajes en Bavel, pero la historia básica seguía siendo la misma.

 

 

 

 

Entre los chinos, se llamaba a la diosa madre "Shingmoo" o "Santa madre", y se representa con un niño en los brazos y rayos de gloria alrededor de su cabeza. Los germanos veneraban a la virgen "Hertha" con un niño en los brazos. Los escandinavos la llaman "Disa" y también la presentaban con el niño en brazos. Los etruscos la llamaban "Nutria"; en India, la "Indrani", que también era representada con un niño en los brazos, y también, entre los druidas, adoraban a la "Virgo Paritura" como a la "Madre de Dios".

 

La madre babilónica era conocida como "Afrodita" o "Ceres", por los griegos; Inana, por los sumerios, y como "Venus" o "Fortuna" por sus devotos en los viejos días de Roma; su hijo era conocido como "Júpiter". Para los hindúes la madre era Devaki y el hijo, Krishna.

 

Por algún tiempo, Isi, la "gran diosa" y su hijo Iswara, han sido venerados en la India, donde se han erigido grandes templos para su culto. En Asia la madre era conocida como "Cibeles", y su hijo "Deoius".

 

Cuando los hijos de Israel cayeron en apostasía, ellos también se descarriaron con este culto de la diosa-madre. Como podemos leer en Shoftim:

 

Olvidaron a Yahweh y adoraron a Baal y a Ashtarot. Shoftim 2:13

 

Ashtarot era el nombre bajo el cual la diosa era conocida por los hijos de Yisrael. Da vergüenza el pensar que aun aunque aquellos que conocían al Elohim verdadero, se alejaban de Él y adoraban a la madre pagana. Pero eso es exactamente lo que hicieron. Uno de los títulos bajo el cual era la diosa conocida por los israelitas, era el de "Reina del Cielo", como leemos:

 

Por el contrario, haremos todo lo que hemos prometido – para hacer ofrendas a la Reina del Cielo y para derramarle libaciones, como solíamos hacer, nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros oficiales, en las ciudades de Yahudah y en las calles de Yahrushalayim. Porque entonces teníamos mucho de comer, nos iba bien y no sufríamos calamidades. Pero desde que dejamos de hacerle ofrendas a la Reina del Cielo y de derramarle libaciones, nos ha faltado de todo, y somos exterminados por la espada y por el hambre. Cuando nosotras quemábamos incienso a la Reina del Cielo y le derramábamos libaciones, ¿acaso era sin la aprobación de nuestros esposos que le hacíamos tortas, a la imagen de ella, y le derramábamos libaciones? YirmeYah 44:17-19

 

El profeta los reprendió por venerarla, pero ellos se rebelaron a pesar de su advertencia, y fue así como trajeron sobre sí mismo una plena destrucción por la mano de Yahweh.

 

En Éfeso, la gran madre era conocida como "Diana". El templo dedicado a ella en esa ciudad era una de las Siete Maravillas del Viejo Mundo. Y no solamente en Éfeso, sino también a través de Asia y del mundo entero era venerada la divina madre:

 

No solamente hay el peligro de que este negocio nuestro caiga en descrédito, sino también que el templo de la gran deidad Artemisa se desprestigie, y que pronto quede despojada de su majestad aquella a quien adoran toda el Asia y el mundo. Hechos 19:27

 

En Egipto, la madre babilónica era conocida como Isis, y su hijo como Horus. Nada es más común, en los monumentos religiosos de Egipto, que el bebé Horus sentado en el regazo de su madre.

 


 

La Reina del Cielo

 

Este culto falso se esparció desde Bavel a varias naciones, con diferentes nombres y formas; finalmente, se estableció en Roma y a través del Imperio Romano.

 

El culto a la grandiosa madre... era muy popular en el Imperio Romano. Existen inscripciones que prueban que los dos (madre e hijo) recibían honores divinos, no solamente en Italia (especialmente en Roma) sino también en las provincias, particularmente en África, España, Portugal, Francia, Alemania y Bulgaria.

Sir James George Frazer, La rama dorada: un estudio sobre magia y religión

 

Fue durante este período de culto prominente a la "madre divina", que aparece en la historia de la humanidad Yahshua, y saca de su costado a la Novia, la saca de la etapa de las sombras y la trae a la luz. Esto no es lo que el cristianismo afirma, que "Jesucristo fundó la iglesia". Yahshua no vino a fundar ninguna institución. Él vino a cumplir toda justicia para poder ser transformado en Ruaj, entrar en cada creyente y así edificar a Su Novia.

Pero la que una vez fue conocida como la "iglesia primitiva" o congregación de los primeros creyentes kadoshim, abandonó su fe original en los primeros siglos y cayó en la gran apostasía que los apóstoles habían anunciado. Cuando vino la "apostasía" se mezcló mucho paganismo en medio de la cristiandad. Se aceptaban en la Iglesia a paganos no convertidos y en numerosos casos se les permitía continuar muchos de sus ritos y costumbres paganos sin restricción alguna, o con pocos protestos por lo menos; en ocasiones se hacían algunos cambios con el fin de que estas creencias paganas parecieran similares a una doctrina creyente.

 

 

Uno de los mejores ejemplos de esta clase de paganismo lo podemos tener en la forma en que la iglesia institucionalizada permitía a los paganos el continuar el culto a la diosa madre, solamente bajo otro nombre. Había muchos paganos que se sentían atraídos al cristianismo, pero era tan fuerte en sus mentes la adoración a la diosa madre, que no la querían abandonar. Entonces los líderes de la Iglesia buscaron una similitud en la cristiandad con el culto de los idólatras paganos para poder atraerlos en gran número y así añadirlos a ella. Esto es real y es admitido por la propia iglesia en su historia.

 

Entonces, ¿a quién podrían usar para reemplazar a la diosa madre del paganismo? Pues claro que a María, la madre de "Jesús". El cambio de nombres también era un asunto básico a ser realizado. Ya hablamos acerca de la importancia del nombre en la cultura hebrea y bajo los conceptos de Yahweh, de manera que era más que esencial para el linaje de la serpiente que, además de infiltrar la nueva creencia que surgía con paganismos, transformándola en una religión más entre las suyas, se asegurara de que bajo ningún concepto los adeptos estuvieran adorando al Elohim verdadero y a su Hijo, robándoles los nombres. Esto, que parece aún superficial a tantos creyentes hoy, que como los antiguos paganos se niegan a abandonar a sus viejos dioses para lanzarse de lleno a los brazos del Único Verdadero, pareció tan básico y esencial a los seguidores de la serpiente que se aseguraron de que el cambio se realizara ya desde los inicios del cristianismo.

 

Como decíamos, para la adoración de la diosa-madre, María era la persona más lógica que podían escoger. De esta manera podían permitir que los paganos continuaran sus oraciones y devociones a su diosa, llamándola ahora con el nombre de María, en lugar de los nombres anteriores con los cuales ellos la conocían. Esto le daba al culto idólatra de los paganos la "apariencia" de cristianismo y de esta forma, ambos bandos podían estar satisfechos e incorporarse así a la Iglesia romana.

 

Y es esto exactamente lo que sucedió. Poco a poco, el culto y doctrinas que habían sido asociados con la madre pagana, vinieron a ser aplicados a María. Así, el culto pagano de la "madre" continuó dispersándose dentro de la Iglesia profesante.

 

Es obvio que este culto a María no era más que una continuación del viaje culto pagano a la madre. Porque a pesar de que Miriam, la madre de Yahshua, era una mujer kadosh, dedicada y temerosa de Yahweh, y fue escogida especialmente para engendrar el cuerpo de nuestro Salvador, no fue nunca considerada como una persona divina o como diosa por la verdadera congregación de los kadoshim original, los primeros creyentes. Ninguno de los apóstoles, ni Yahshua mismo, dieron alguna vez a entender que se debería venerar a Miriam. Como lo indica la "Enciclopedia Británica" en su Volumen 14, p.309, durante los primeros siglos de la Iglesia no fue puesto ningún énfasis en María. No fue sino hasta la época de Constantino, la primera parte del siglo IV, cuando empezaron a tratar a María como a una diosa. Pero aun durante ese período, esta idolatría era denunciada por la Iglesia, lo cual es evidente en las palabras de Epifanio, quien denunció a ciertas mujeres de Tiro, Arabia y otros sitios por rendir culto a María como a una diosa verdadera y hacerle ofrendas en su capilla. Sin embargo, unos años más tarde, el culto a María no solamente era permitido por lo que es actualmente conocida como la Iglesia Católica, sino que vino a ser una de sus doctrinas principales y lo continúa siendo hasta hoy día.

 

Como Roma había sido por mucho tiempo el centro del culto a la diosa del paganismo, no debemos extrañarnos de que éste fuera uno de los primeros sitios donde le culto a María se estableció dentro de la "iglesia". Este es un hecho que revela abiertamente que el culto a María fue el resultado directo de la influencia pagana.

 

Otra ciudad en donde el culto idólatra pagano a la madre era popular fue Éfeso, y ahí también se hicieron intentos por mezclarlo con la cristiandad. En Éfeso, desde tiempos primitivos, la diosa-madre era llamada Diana por los romanos y Afrodita por los griegos (Hechos 19). En dicha ciudad los paganos la veneraban como la diosa de la virginidad y la maternidad. Se decía que ella representaba los poderes generadores de la naturaleza, por lo cual se la representaba con muchos senos. Una torre de Bavel adornaba su cabeza.

 

Cuando se tienen creencias durante siglos, por lo general no es fácil abandonarlas. De modo que cuando llegó la apostasía, los líderes de la iglesia de Éfeso razonaron que si permitían a los paganos continuar su adoración a la diosa-madre, los podrían atraer a la "iglesia". Así, entonces, en Éfeso se incorporó el culto a la diosa pagana y se mezcló con el cristianismo. Se sustituyó el nombre de Diana por el de María y los paganos continuaron orando a la diosa-madre. Conservaron sus ídolos con la imagen de ella y la iglesia profesante permitió que los adorasen junto con Cristo. Pero no es mezclando lo corrupto con lo kadosh que Yahweh levanta a la Novia, que es su verdadera edificación, su verdadero templo, la cual debe culminar convirtiéndose en plenitud en la Nueva Yahrushalayim, la Novia del Cordero y su Esposa. Yahweh jamás "limpia" las cosas satánicas y las incorpora a Su propio culto, esa es una idea puramente humana y claramente influenciada por haSatán; no, Yahweh "hace nuevas todas las cosas", y lanza al fuego todo lo que proviene de los cultos satánicos.

 

Cuando Shaúl llegó a Éfeso todavía no se había infiltrado el paganismo. Los creyentes eran verdaderos convertidos y en esos días, al convertirse al "cristianismo" naciente, ellos destruían las imágenes de la diosa-madre (Hechos 19:24- 27). ¡Cuán trágico fue que esta iglesia aceptara y aún adoptara la idolatría abominable de la diosa-madre disfrazándola bajo el hábito de la cristiandad! Pero claro, este fue el plan satánico. Finalmente, cuando el culto a María se hizo una doctrina oficial de la Iglesia Católica, en el año 431 EC, fue precisamente en el Concilio de Éfeso, la ciudad de la diosa pagana Diana. Es obvia la influencia pagana que indujo al Concilio a tomar esta decisión.

 

Otro sitio del culto idólatra a la diosa-madre fue Alejandría (Egipto). Aquí era conocida bajo el nombre de Isis. Cuando el cristianismo se propagó hasta Alejandría, se hicieron convenios similares a los que se habían adoptado en Roma y Éfeso. El culto idólatra-pagano a la madre fue cuidadosamente inyectado a la "cristiandad" por los teólogos de la iglesia en dicha ciudad. Ahora, el simple hecho de que haya sido en ciudades como Alejandría, Éfeso y Roma donde la idolatría pagana se mezcló primeramente con la cristiandad, muestra de manera definitiva la continuación directa del antiguo paganismo. Esto prueba más aún que el culto a María no es más que el antiguo culto popular a la diosa-madre pagana y se puede confirmar notando los títulos que se le confirieron a María así como la forma ritual de sus cultos.

 

Por ejemplo, María es frecuentemente llamada "la Madonna". Pero este título no tiene absolutamente nada que ver con Miriam, la madre de Yahshua. En cambio, esta expresión es la traducción de uno de los títulos por los cuales la diosa babilónica era conocida. Nimrod vino a ser conocido como Baal, señor, y el título de su esposa, la divinidad femenina, sería el equivalente: Baalti, señora. Ma-donna significa "mi señora" en italiano, viniendo del latín Mea Domina.

 

Entre los fenicios, la madre-diosa era conocida como "Nuestra Señora de los Mares" (Diccionario bíblico Harper, p. 47), y aún hoy este título se aplica a María a pesar de que no hay absolutamente ninguna conexión entre María y el y el mar en los evangelios. Pero sí tenemos una muy clara conexión entre el mar y los demonios y los muertos.

 

Las Escrituras claramente indican que sólo hay un mediador entre Elohim y los hombres, "Yahshúa el Mashíaj hombre" (Timotio Alef 2:5). A pesar de esto, el catolicismo romano enseña que María también es "mediadora", y es por esto que las oraciones a ella forman una parte muy importante en el culto católico. ¿Pero cómo fue que María vino a ser conocida como "mediadora"? Nuevamente tenemos la influencia del paganismo, pues la madre-diosa de Bavel tenía nombres como "Mylitta", que significa "la mediadora". Y así esto también pasó a la iglesia apóstata, ¡la cual hasta hoy en día habla de María como mediadora!

 

Otro título que proviene del paganismo y fue aplicado a María es el de "Reina del Cielo". En ningún lugar de las Escrituras se dice que Miriam, la madre de Yahshua, tuviera que ser nombrada Reina del Cielo; pero este título lo poseía la diosa-madre pagana que era adorada siglos antes de que Miriam siquiera hubiera nacido. Ya en los días de YirmeYah el pueblo adoraba a la "reina del cielo" y practicaba ritos que eran sagrados para ella.

 

Los hijos recogen la leña, los padres encienden el fuego, y las madres amasan la masa para hacerle tortas a la Reina del Cielo, y derraman libaciones a otros elohim, para ofenderme. ¿Es a mí a quien ofenden? —dice Yahweh—. Es más bien a ellos mismos, para su propia deshonra. Ciertamente, así ha dicho Adonay Yahweh: "Mi ira y mi furia se derraman sobre este lugar, sobre hombres y bestias, sobre los árboles del campo y los frutos de la tierra. Se encenderá sin que nadie la apague". YirmeYah 7:18-20

 

Como hemos visto, el nombre de la diosa-madre en Egipto era Isis y su hijo Horus (Osiris). Pues bien, uno de los títulos por los cuales Isis era conocida también, era el de "Madre de Dios". Más tarde este título fue aplicado a María por los teólogos de Alejandría. Nuevamente este era un intento obvio para hacer aparentar a la cristiandad semejante al viejo paganismo con la adoración a su diosa. Bien sabemos que Miriam era la madre de Yahshua, pero el título católico y el significado original de éste trascendieron y pusieron a la sencilla y humilde madre del Salvador en una posición exaltada ajena al B'rit Hadashá. Y en la misma forma se sigue instruyendo a los católicos actualmente.






Aquí encontramos que los títulos "reina del cielo", "nuestra señora de los mares", "mediadora", "madonna", "madre de Dios" y otros más que antes se atribuían a la diosa-madre pagana, fueron poco a poco siendo aplicados a María. Tales títulos indican claramente que el supuesto culto a María de hoy es en realidad una continuación del culto a la diosa pagana.

 

Pero existen todavía más pruebas que se pueden observar en la forma en que se representa a María en el "arte" de la Iglesia apóstata. Tan bien fijada en la mente pagana estaba la imagen de la diosa-madre con el niño en los brazos, que cuando los días de la apostasía llegaron, la antigua estampa de Isis y Horus fue finalmente aceptada, no solamente entre la opinión popular, sino por su sanción episcopal, como el retrato de la virgen y su hijo. Se adjuntaron representaciones de Isis y su hijo en un marco de flores. Esta práctica también fue aplicada a María, quien casi siempre es mostrada en la misma forma, como bien lo saben los estudiantes del arte medieval.

 

Para satisfacer las mentes supersticiosas de los gentiles, líderes de la Iglesia apóstata trataron de hacer a María similar a la diosa del paganismo y exaltarla a una superficie divina, para competir con la madre-pagana. Y de igual manera se hicieron estatuas de Miriam, a pesar de que las Sagradas Escrituras prohíben tal práctica. En algunos casos, las mismas estatuas que habían sido veneradas como Isis (con su hijo), fueron simplemente cambiadas de nombre y se dieron a conocer como María y su hijo Cristo, de modo que continuara el antiguo culto (lo mismo han hecho con tantas otras antiguas estatuas, sólo cambiándoles el nombre, como ocurre con la famosa estatua de San Pedro en el Vaticano, que no es otro que Zeus con el nombre cambiado).

 

 

 

 

 

FUENTES:

  • Alexander Hislop – Las Dos Babilonias
  • Danny Vierra - La Virgen María ¿Está Muerta o Viva?
  • Flavio Josefo, Antigüedades Judías
  • Ralph Woodrow – Babilonia, misterio religioso
  • Cibeles
  • "The Influence of the Mystery Religions on Christianity"
  • Nimrod: Father of The Mother of Harlots
  • Julio César Clavijo S. - Un dios Falso Llamado Trinidad

 

 



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Publicado por: Anunciadora de Sión


SOY CREYENTE EN YAHSHUA, MIEMBRO DE LA NOVIA, ÓRGANO DEL CUERPO, CO-EDIFICADORA DEL REINO

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Lo que proviene del Ruaj pertenece al Cuerpo, porque el Ruaj no tiene Copyright.
Y si el hombre reivindica "derechos de autor", su mensaje proviene de la carne y no sirve.
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