El Nacimiento De Venus
Un planeta gira en una órbita
bastante circular alrededor de un cuerpo mayor; hace contacto con otro cuerpo,
un cometa, que viaja en una elipse alargada. El planeta se desliza de su eje,
se sale desordenadamente de su órbita, deambula de manera bastante errática y
al final se libera del abrazo del cometa.
El cuerpo de la elipse larga experimenta
alteraciones similares. Desviado de su camino, se desliza hacia una nueva
órbita; su largo tren de sustancias gaseosas y piedras es despedido por el
material del planeta por el que pasa, o se desprende y gira como un cometa más
pequeño a lo largo de su propia elipse; la parte de la cola es retenida por el
cometa padre en su nueva órbita.
Los registros mexicanos antiguos
dan el orden de los sucesos. El sol fue atacado por Quetzalcóatl; después de la
desaparición de este cuerpo celeste en forma de serpiente, el sol se negó a
brillar y durante cuatro días el mundo se vio privado de su luz; mucha gente
murió en ese momento. A partir de entonces, el cuerpo en forma de serpiente se
transformó en una gran estrella.
La estrella conservó el nombre de
Quetzalcóatl. Esta gran y brillante estrella apareció por primera vez en el
este.
Sin embargo, aquí se presenta, bajo el velo de la "alegoría, uno de los episodios más extraños de esta época anterior, el de la apoteosis de Nanahuatl y su metamorfosis en el sol. Esta ceremonia se lleva a cabo en Teotihuacan. Los dioses se reencuentran allí, y la reaparición del sol, de cuya vista habían estado privados durante mucho tiempo, es el objeto de su reencuentro. Es necesario un sacrificio para alejar la estrella del día y conseguir que vuelva a aparecer en el horizonte. Para ello, es uno de los dioses el que debe inmolarse. Se enciende la pira. Quien tenga el valor de arrojarse en ella merecerá los honores de la apoteosis, porque de sus cenizas renacerá el dios que ilumina el universo. Nanahuatl está ahí con los demás, pero está enfermo, sufre de una enfermedad terrible, incurable; no hay nada más que lo conecte con la vida de la que ha agotado las alegrías: los otros lo animan. "Depende de ti, le dicen, mantener el cielo y la tierra". Nanahuatl obedeció este mandamiento, se eleva hacia las llamas donde es devorado instantáneamente. Metztli, su compañero, imita su ejemplo y, poco después, vemos en el este levantarse la estrella brillante que alegrará la naturaleza. A partir de ese momento, los honores que se le rindieron al sol se confundieron con los que se le otorgaron a Nanahuatl, y los que se le atribuyeron a la luna también fueron devueltos a Metztli quien había imitado su valentía.
Brasseur - Histoire des nations civilisées du Mexique Vol I, página 181.
Quetzalcóatl es el conocido nombre
del planeta Venus.
Según los ancianos, el sol, después de la desaparición de Quetzalcóatl, se negó a mostrar su luz y durante cuatro días el mundo se vio privado de ella. Entonces apareció una gran estrella en la que se había transformado; se le dio el nombre de Quetzalcóatl, atribuyéndole, al mismo tiempo, el de "Tiahuizcalpan-Teuctli", o el señor del signo luminoso, y la montaña de fuego Poyauhtecatl fue llamada, por su causa, "Citlaltepetl", o montaña de la estrella. Se agregó que el Cielo, para dar testimonio de su ira por la persecución ejercida contra su profeta, mató a un gran número de personas "que murieron de hambre o pestilencia".
Brasseur - Histoire des nations civilisées du Mexique Vol I, página 311.
La secuencia de las estaciones y la
duración de los días y las noches se desordenó:
Dirigieron a los demás el siguiente discurso: "Llegará el día en que se apague la luz para el gobierno de nuestra república, pero mientras dure la ausencia del dios, nuestro señor, ¿cómo actuaremos para conducir adecuadamente a la nación? ¿Qué orden habrá que establecer en todas las cosas, silos sabios se llevaron los libros por medio de los cuales gobernaban?".
"Fue entonces", añade el historiador, "cuando inventaron la astrología judicial y el arte de interpretar los sueños; que regularon el cálculo de días, noches y horas, con las diferencias de los tiempos; cómputo que se mantuvo durante las diversas dominaciones de los toltecas, mexicanos, tecpanèques y chichintecs".
Brasseur - Histoire des nations civilisées du Mexique Vol I, página 120.
Parecía una serpiente monstruosa.
¿Cómo podría verse un cometa llameante surcando los cielos?
"Es notable, además, que el tiempo se mide desde el momento de su aparición (Lucero del Alba)... Tlahuizcalpanteuctli o el Lucero del Alba apareció por primera vez tras las convulsiones de la tierra abrumada por un diluvio. Es esta serpiente la que ondula en monstruosos pliegues alrededor del edificio que admiramos en Uxmal, bajo el nombre de Palacio de las Vestales, y entre cuyas fauces se encuentra una cabeza coronada de la diadema real. Esta serpiente está adornada con plumas: por eso se le llama Quetzalcohitatl, Gucumatz o Kukulcan".
Algo notable, además, es que desde el momento de su aparición data la medida del tiempo; por eso se le sigue llamando Ce Acatl, Una Caña, nombre del día en que apareció por primera vez Tlahuizcalpan-teuctli o Lucero de la Mañana, tras las convulsiones de la tierra dañada por el diluvio...
Brasseur: Sources de I'histoire primitive du Mexique, p. 82 y Nota al pie
El arreglo de plumas de
Quetzalcóatl "representaba llamas de fuego":
"Los atavíos con que lo aderezaban eran los siguientes: una mitra en la cabeza, con un penacho de plumas, que llaman quetzalli... Llevaba a cuestas por divisa un plumage, á manera de llamas de fuego..."
B. de Sahagún - Historia General De Las Cosas De Nueva España 04, Tomo I, Libro 1, Capítulo Vida, página 4
El cataclismo, acompañado de una oscuridad
prolongada, parece haber sido el de los días del Shemot, cuando una tempestad
de cenizas oscureció el mundo perturbad por el cataclismo.
Algunas de las referencias pueden
aludir a la catástrofe posterior de la época de la conquista de Yahoshúa, cuando
el sol permaneció más de un día en el cielo del viejo mundo. Dado que fue el
mismo cometa el que EN AMBAS OCASIONES hizo contacto con la tierra, y en cada
uno de los contactos el cometa cambió su propia órbita, la pregunta relevante
no es "¿En qué ocasión el cometa cambió su órbita?", sino antes que
nada, "¿Qué cometa se transformó en planeta?", o "¿Qué planeta
fue un cometa en tiempos históricos?". La transformación del cometa en
planeta se inició al entrar en contacto con la Tierra a mediados del segundo
milenio anterior a la era actual y se llevó a cabo un paso más un jubileo más
tarde.
Después de los dramáticos eventos
de la época del Shemot, la Tierra estuvo envuelta en densas nubes durante
décadas y la observación de las estrellas no fue posible. Después del segundo
contacto, Venus, el nuevo y espléndido miembro de la familia solar, fue visto
moviéndose a lo largo de su órbita. Esto sucedió en los días de Yahoshúa, una
designación de tiempo significativa para nosotros que leemos y conocemos el sexto
libro de las Escrituras, pero para los antiguos era "la época de
Agag". Fue el rey por cuyo nombre se conoció el cataclismo (el Diluvio de
Ogyges) y que, según la tradición griega, sentó las bases de Tebas en Egipto.
Del libro de Marcus Varro, titulado De la raza del pueblo romano, cito palabra por palabra el siguiente ejemplo: "Ocurrió un notable portento celestial; porque Castor registra que, en la brillante estrella Venus, llamada Vesperugo por Plauto, y la hermosa Hesperus por Homero, ocurrió un prodigio tan extraño, que cambió su color, tamaño, forma, curso, lo que nunca sucedió antes ni después. Adrastus de Cyzicus y Dion de Nápoles, famosos matemáticos, dijeron que esto ocurrió en el reinado de Ogyges".
Agustín de Hipona - La Ciudad De Dios, Libro XXI, pág 430, Online)
La conmoción que tuvo lugar en los
días de Yahoshúa y Agag, el diluvio que ocurrió en los días de Ogyges, la
metamorfosis de Venus en los días de Ogyges, la estrella Venus que apareció en
el cielo de México después de una noche prolongada y una gran catástrofe: todos
estos sucesos están relacionados (y algunos otros más, como veremos también).
Agustín prosiguió haciendo un
curioso comentario sobre la transformación de Venus:
Ciertamente, ese fenómeno perturbó los cánones de los astrónomos, si los hubo entonces, por los que tabulan, como mediante un cálculo infalible, los movimientos pasados y futuros de las estrellas, para asumirlos para afirmar que esto que le sucedió a la estrella de la mañana (Venus) nunca sucedió antes ni después. Pero leemos en los libros divinos que incluso el sol mismo se detuvo cuando un hombre santo, Josué, hijo de Nun, le había rogado esto a Dios hasta que terminara con victoria la batalla que había comenzado...
Agustín de Hipona, ibíd.
Agustín no tenía la menor idea de
que Cástor, citado por Varro, el Libro de Jasher, citado en el Libro de
Yahshúa, y el propio libro de Yahoshúa SE REFIEREN AL MISMO SUCESO.
¿Guardan silencio las fuentes
hebreas sobre el nacimiento de una nueva estrella en los días de Yahoshúa? No.
Está escrito en una crónica samaritana que durante la invasión de Palestina por
los yisraelitas bajo Yahoshúa, nació una nueva estrella en el este:
...la madre de Sliaubak subió a un mirador que tenía en el-Qaimun para adorar a la gran luminaria según su costumbre, y cuando vio la estrella luminosa, es decir, Nabih, surgiendo del este, se apresuró a descender hacia su hijo, y ella le dijo: "¡He aquí! Una luna luminosa está saliendo del este, y alrededor de ella hay estrellas brillantes que significan Nabih y sus soldados; y si ella es de nuestros enemigos, ¡ay de ti y ay de mí, pero si nos ayuda, a ti te irá bien y a mí también!".
The Samaritan chronicle or The book of Joshua the son of Nun, página 92
Las crónicas chinas registran que "una estrella brillante apareció en los
días de Yahu (Yahou)". (Legge: The Chinese Classics (Hong Kong ed.,
1865), III, Pt. 1, 112, nota).
En todos los países del mundo antiguo
podemos rastrear los mitos cosmológicos del nacimiento del planeta Venus. Si
buscamos al dios o diosa que representa al planeta Venus, debemos preguntarnos
cuál de los dioses o diosas no existió desde el principio, sino que nació en la
familia. Las mitologías de todos los pueblos se refieren únicamente al
nacimiento de Venus, no al de Júpiter, Marte o Saturno. Se describe a Júpiter
como heredero de Saturno, pero su nacimiento no es un tema mitológico. Horus de
los egipcios y Vishnu, nacido de Shiva, de los hindúes, eran deidades recién
nacidas. Horus luchó en el cielo con la serpiente monstruosa Seth; también lo
hizo Vishnu. En Grecia, la diosa que apareció de repente en el cielo fue Palas
Atenea. Saltó de la cabeza de Zeus-Júpiter. En otra leyenda, ella era la hija
de un monstruo, Palas-Tifón, que la atacó y a quien ella mató.
La muerte del monstruo por un
dios-planeta es la forma en que los pueblos percibieron la convulsión de la
columna de humo cuando la tierra y el cometa Venus se perturbaron en sus
órbitas, y la cabeza del cometa y su cola saltaron contra unos a otros en
descargas eléctricas violentas.
El nacimiento del planeta Atenea se
canta en el himno homérico dedicado a ella, "la diosa gloriosa, virgen,
Tritogeneia". Cuando ella nació, la bóveda del cielo —el gran Olimpo—
"comenzó a tambalearse horriblemente", "la tierra alrededor
gritó espantosamente", "el mar se movió y se agitó con olas oscuras,
mientras la espuma estallaba repentinamente", y el sol se detuvo durante
"un largo rato". (Hesíodo - Himnos Homéricos, XXVIII a Atenas, II
1-16, Online)
El texto griego habla de "olas
purpúreas" y del "mar que se eleva como un muro", y el sol se
detiene en su curso. (Farnell: The Cults of the Greek States (1896), I, 281, Online página 328).
Atenea, o Minerva latina, es
llamada Tritogeneia (o Tritonia) por el lago Tritón (Agustín - La Ciudad de
Dios, Libro XVIII, capítulo 8). Este lago desapareció en África cuando irrumpió
en el océano, dejando atrás el desierto del Sahara, una catástrofe relacionada
con el nacimiento de Atenea.
Diodoro, refiriéndose a autoridades
más antiguas no reveladas, dice que el lago Tritón en África "desapareció de la vista en el curso de
un terremoto, cuando las partes que se extendían hacia el océano se rompieron
en dos". Este relato implica que un gran lago o pantano en África,
separado del Océano Atlántico por una barrera montañosa, desapareció cuando la
barrera se rompió o bajó en una catástrofe. Ovidio dice que Libia se convirtió
en un desierto como consecuencia de la conflagración de Faetón.
En la Ilíada se dice que Palas
Atenea "arrojó a la tierra una
estrella reluciente" de la que brotaban chispas; se lanzó como una
estrella "enviada por Júpiter para
ser un presagio para los marineros o para una gran cantidad de guerreros, una
estrella reluciente". La contraparte de Atenea en el panteón
asiro-babilónico es Astarté (Ishtar), quien destroza montañas, "antorcha brillante del cielo"
ante cuya aparición "tiemblan el
cielo y la tierra", que causa oscuridad y aparece en un huracán.
Como Astarté (Ashteroth-Karnaim),
Atenea fue representada con cuernos.
"Atenea, hija de Zeus... sobre su cabeza se puso el casco con dos
cuernos", dijo Homero. Palas Atenea se identifica con Astarté (Ishtar)
o el planeta Venus de los babilonios (Langdon: Tammuz and Ishtar (1914), p. 97,
Online, página 114)
Anaitis de los iraníes también se
identifica como Palas Atenea y como el planeta Venus:
...luego Anaitis, la diosa de las aguas fértiles asimilada a Venus y Cibeles, y que, presidiendo la guerra, también fue invocada con el nombre de Minerva...
Cumont - Les Mystères de Mithra (Online, página 111)
Plutarco identificó a Minerva de
los romanos o Atenea de los griegos con Isis de los egipcios, y Plinio
identificó el planeta Venus con Isis.
El nacimiento de Atenea se asignó a
mediados del segundo milenio. Agustín escribió: "Se dice que Minerva (Atenea) apareció... en los tiempos de
Ogyges". Esta declaración se encuentra en La Ciudad De Dios, el libro
que contiene la cita de Varro de que el planeta Venus ha cambiado de curso y
forma en la época de Ogyges, que ya mencionamos. Agustín también sincronizó a
Yahoshúa con el tiempo de las actividades de Minerva (Agustín de Hipona - La
Ciudad De Dios, Libro XVIII, 12 - Online, página 241).
La primera aparición de
Atenea-Minerva tuvo lugar el día en que los yisraelitas cruzaron el Mar de
Cañas. La noche entre los días trece y catorce del primer mes después del
equinoccio de primavera fue la noche del gran terremoto; seis días después, el
último día de la semana de Pésaj, según la tradición hebrea, las aguas se
amontonaron como montañas y los fugitivos cruzaron sobre el lecho seco del mar.
El nacimiento de Palas Atenea o su
primera visita a la tierra fue la causa de una perturbación cósmica, y el
recuerdo de esa catástrofe fue "un
día de ira en todos los calendarios de la antigua Caldea".
Ahora bien, ¿fue el planeta Júpiter
o Venus el que provocó la catástrofe de la época del Shemot? Algunas fuentes
mitológicas antiguas apuntan a Venus, otras fuentes apuntan a Júpiter. En un
grupo de leyendas, Júpiter (Zeus) es el protagonista del drama: deja su lugar
en el cielo, se apresura a luchar contra Tifón y lo golpea con rayos. Pero
también otras leyendas y fuentes históricas, que ya he citado, indican que fue
el planeta Venus, o Palas Atenea de los griegos. Atenea mató a su padre,
Tifón-Palas, el monstruo celestial, y la descripción de esta batalla no es
diferente a la de la batalla en la que Zeus mató a Tifón.
Sin duda alguna, fue el cometa
Venus, antes de convertirse en planeta, el que provocó la catástrofe de los
días del Shemot. Entonces, ¿por qué una parte de las leyendas vincula este
evento con Júpiter?
El consenso de autores antiguos
hace que Atenea-Venus sea la descendencia de Júpiter: ella brotó de su cabeza,
y este nacimiento estuvo acompañado de grandes perturbaciones en las esferas
celeste y terrestre. El cometa se precipitó hacia la tierra y no se pudo
distinguir muy bien si era el planeta Júpiter o su descendencia la que se
acercaba. Sucede también que, en una época anterior, Júpiter ya había causado
estragos en la familia planetaria, incluida la Tierra, y por lo tanto era
natural ver en el cuerpo que se acercaba el planeta Júpiter, más aun siendo que
Venus realmente procedió de Júpiter.
La teoría moderna de la creación de
los planetas atribuye el nacimiento de los mismos al proceso de expulsión de
los más grandes. Esto parece ser cierto en el caso de Venus. La otra teoría
moderna, que atribuye el origen de los cometas de período corto a la expulsión
de grandes planetas, también es correcta: Venus fue expulsado como cometa y
luego cambiado a planeta después del contacto con varios miembros del sistema
solar.
Venus, descendiente de Júpiter,
tenía todas las características conocidas por los hombres de los primeros
encuentros cataclísmicos. Cuando una bola de fuego rompió el pilar de nube y lo
arrojó con rayos, la imaginación de la gente vio en esto al dios planeta
Júpiter-Marduk corriendo para salvar la tierra matando al monstruo serpiente
Tifón-Tiamat.
No es extraño, por lo tanto, que,
en lugares tan alejados de Grecia como las islas de Polinesia, se relata que "el planeta Júpiter suprimió la cola de
la gran tormenta" (Williamson: Creencias religiosas y cósmicas de la
Polinesia Central, I, 123).
En un culto local en Egipto, el
nombre de "Isis" originalmente pertenecía a Júpiter, siendo
"Osiris" Saturno. En otro culto local, "Amon" era el nombre
de Júpiter. "Horus" originalmente también era Júpiter (Mercer: Horus,
Royal God of Egypt). Pero cuando un nuevo planeta nació de Júpiter y se
convirtió en supremo en el cielo, los espectadores no pudieron reconocer
fácilmente la naturaleza exacta de este cambio. Le dieron el nombre de
"Isis" al planeta Venus y, a veces, el nombre de "Horus".
Esto debe haber causado confusión.
Al leer las citas que se han dado de las liturgias oficiales, uno se confunde con las diversas relaciones que existen entre madre e hijo. Ahora es su consorte, ahora su hermano. Ahora un joven que muere en la fuerza de la virilidad, ahora un bebé alimentado del pecho...
Langdon: Tammuz and Ishtar, p. 24 (Online página 42)
También "Ishtar" de
Asiria-Bavel era en los primeros tiempos el nombre del planeta Júpiter; más
tarde fue trasladado a Venus, Júpiter conservando el nombre de
"Marduk".
"Baal", otro nombre más
para Júpiter, fue un nombre anterior para Saturno, y más tarde se convirtió en
el nombre de Venus. A veces se utiliza la forma femenina Baaltis, Baalat o
Baalat Gebal. En la mitología de Oriente Medio, es el nombre que recibe una
divinidad femenina que acompañaba a Baal. Era considerada por los fenicios y
los sirios como la esposa o la hermana de este dios. Como Baalat Gebal o
"Señora de Biblos", era la diosa de la ciudad de Biblos, Fenicia en
la antigüedad. Para los griegos era conocida además de como Baaltis, como
Atargatis. Atargatis era la diosa principal del norte
de Siria. Ctesias también usó el nombre
Derketo o Derceto, que es la supuesta madre de Semíramis.
Adoración De La Estrella De La Mañana
Ahora que se ha demostrado que fue
Venus quien, en un intervalo de cincuenta y dos años, causó dos catástrofes
cósmicas en el siglo XV antes de la era actual, comprendemos también las
diferentes conexiones históricas entre Venus y estas catástrofes.
En numerosos pasajes bíblicos y
rabínicos se dice que cuando los yisraelitas salieron del monte Sinay al
desierto, estaban cubiertos de nubes. Estas nubes fueron iluminadas por la
columna de fuego, de modo que dieron una luz pálida.
Amoz dice que durante los cuarenta
años en el desierto los yisraelitas no sacrificaron al Adón:
¿Me ofrecieron ustedes sacrificio y oblación aquellos cuarenta años en el desierto, oh Casa de Yisrael? Antes bien, llevaban el tabernáculo de su Moloc y Kiyún, sus ídolos, la estrella de tu dios que se hicieron. Amoz 5:25-26
¿Qué imagen de la estrella se llevó
en el desierto? ¿Fue el becerro de oro o la serpiente de bronce?
Mosheh hizo una serpiente de bronce y la montó en un asta de bandera... Bamidbar 21:9
Siete siglos y medio después, esta
serpiente de bronce de Moshe fue quebrada por el rey Ezequías, guiado en su
celo por el profeta YeshaYah:
...porque hasta aquel entonces los yisraelitas le habían estado ofreciendo sacrificios; y la llamaban Nejushtán... Melajim Bet 18:4
La serpiente de bronce era muy
probablemente la imagen del cometa que apareció como una serpiente en
movimiento para todos los pueblos del mundo. ¿O fue la "estrella de
David", la estrella de seis puntas?
La Venus-Isis egipcia, la
Venus-Ishtar babilónica, la Venus-Atenea griega eran diosas representadas con
serpientes y, a veces, representadas como dragones. "Ishtar, el dragón temible", escribió Assurbanipal.
El lucero de la mañana de los
toltecas, Quetzalcóatl, también se representa como un gran dragón o serpiente:
"cohuatl" en náhuatl es "serpiente", y el nombre significa
"serpiente emplumada". La estrella de la mañana de los indios de la
tribu chichimeca en México se llama "nube serpiente", un nombre
notable por su relación con la columna de nube y las nubes que cubrían el globo
después del contacto de la tierra con Venus.
Cuando Quetzalcóatl, el legislador
de los toltecas, desapareció al acercarse una gran catástrofe y el lucero de la
mañana que llevaba el mismo nombre se elevó por primera vez en el cielo, los
toltecas "regularon el cómputo de
los días, las noches, y las horas según la diferencia horaria".
La gente de Ugarit (Ras-Shamra) en
Siria se dirigió a Anat, su planeta Venus: "Inviertes
la posición del amanecer en el cielo". En el Codex Borgia mexicano, la
estrella vespertina está representada con el disco solar en su dorso. En los
salmos babilónicos, Ishtar dice:
Haciendo temblar los cielos y temblar la tierra,
Por el resplandor que ilumina el cielo,
Junto al fuego ardiente que llueve sobre la tierra hostil, soy Ishtar.
Ishtar soy yo por la luz que surge en el cielo,
Ishtar la reina del cielo soy yo por la luz que surge en el cielo
Yo soy Ishtar; en lo alto viajo...
Hago temblar los cielos, hago temblar la tierra,
Esa es mi fama...
La que alumbra en el horizonte de los cielos,
Cuyo nombre es honrado en las habitaciones de los hombres,
Esa es mi fama.
"Reina de los cielos arriba y abajo" se diga,
Esa es mi fama.
Los montes abrumo por completo,
Esa es mi fama.
Langdon: Sumerian and Babylonian Psalms (1909), pp. 188, 194.
Los festivales del planeta Venus se
llevaron a cabo en la primavera. "Nuestros
antepasados dedicaron el mes de abril a Venus",
escribió Macrobius.
Macrobe: Œeuvres (ed. Panckoncke, 1845), I, 253.
Baal de los kenaanitas y del Reino
del Norte de Yisrael fue adorado en Dan, la ciudad del culto del becerro, y
multitudes lo visitaron durante la semana de Pésaj. El culto a Venus también se
extendió a Yahudah. Según Melajim Bet (23:5), el rey Josías en el siglo séptimo
"echó por tierra a los sacerdotes
idólatras, a quienes los reyes de Yahudá habían ordenado para quemar incienso
en los lugares altos de las ciudades de Yahudá y en los alrededores de
Yahrushalayim; también los que quemaron incienso a Baal, al sol, a la luna, a
los planetas y a todo el ejército de los cielos". Baal, el sol, la
luna y los planetas, es la división que también usa Demócrito: Venus, el sol,
la luna y los planetas.
La estrella de la mañana de los
fenicios y de los sirios era Asterot-Karnaim, como ya mencionamos antes,
Astarté de los cuernos. Belith de Sidón también era Venus, e Izével (Jezabel),
esposa de Ajav, la convirtió en la deidad principal del Reino del Norte.
Recordemos el capítulo 18 de Melajim Alef, en que EliYah mata a los sacerdotes
paganos:
Ahora, manda que se reúnan conmigo en el monte Karmel todo Yisrael, los 450 profetas de Baal y los 400 profetas de Asherá que comen de la mesa de Izével. Melajim Alef 18:19
La "reina del cielo",
mencionada repetidamente por YirmeYah, era Venus. Las mujeres de Yahrushalayim
hicieron tortas para la reina del cielo y la adoraron desde los techos de sus
casas:
Los hijos recogen la leña, los padres encienden el fuego, y las madres amasan la masa para hacerle tortas a la Reina del Cielo, y derraman libaciones a otros elohim, para ofenderme. YirmeYah 7:18
"En el asunto del que nos hablaste en nombre de Yahweh, no te escucharemos. Por el contrario, haremos todo lo que hemos prometido - para hacer ofrendas a la Reina del Cielo y para derramarle libaciones, como solíamos hacer, nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros oficiales, en las ciudades de Yahudah y en las calles de Yahrushalayim. Porque entonces teníamos mucho de comer, nos iba bien y no sufríamos calamidades. Pero desde que dejamos de hacerle ofrendas a la Reina del Cielo y de derramarle libaciones, nos ha faltado de todo, y somos exterminados por la espada y por el hambre. Cuando nosotras quemábamos incienso a la Reina del Cielo y le derramábamos libaciones, ¿acaso era sin la aprobación de nuestros esposos que le hacíamos tortas, a la imagen de ella, y le derramábamos libaciones?" (...) Así ha dicho Yahweh de los Ejércitos, el Elohim de Yisrael: "Ustedes y sus esposas han confirmado con hechos lo que han dicho en palabras: "Cumpliremos los votos que hemos hecho, de quemar incienso a la Reina del Cielo y de derramarle libaciones". ¡Así que confirmen sus votos; realicen sus votos! YirmeYah 44:16-19, 25
En Chipre no era Júpiter ni ningún
otro dios, sino "la reina de Kypris, a quien solían apaciguar con dones
sagrados... derramando libaciones sobre el suelo de miel amarilla".
A la estrella árabe de la mañana,
reina del cielo, al-Uzza, se sacrificaron niños y niñas hasta los tiempos
modernos. Asimismo, se llevaron sacrificios humanos al Lucero de la Mañana en
México; esto fue descrito por los primeros autores españoles.
En Bavel, Venus fue representada
como una estrella de seis puntas, que también tiene la forma del escudo de
David, o como un pentagrama, una estrella de cinco puntas (sello de Shlomó) y,
a veces, como una cruz; como una cruz también fue representada en México.
Los atributos y hechos de la
Estrella de la Mañana no fueron inventados por la gente del mundo: esta
estrella rompió montañas, sacudió el globo con tal violencia que parecía como
si los cielos estuvieran temblando, era una tormenta, una nube, un fuego, un
dragón celestial, una antorcha y una estrella ardiente, y llovió fuego sobre la
tierra.
En los atributos y en los hechos
atribuidos al planeta Venus (Isis, Ishtar, Atenea) reconocemos los atributos y
los hechos del cometa descritos en las secciones anteriores.
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