VDA16 - Los Malos Higos 04

 

La Parábola De La Viña En Profecía

 

La muerte en el madero del Mashíaj fue el acto final de rebelión y anarquía en la Ciudad de Sangre antes de que la corte divina pronunciara su condenación. Vemos esto en la parábola de Yahshua de la viña en Luka 20:9-18, la cual ya analizamos antes, pero vamos a ver ahora su cumplimiento profético. Los cuidadores de la viña maltrataban a los sirvientes (profetas) que el Dueño había enviado a recibir los frutos. Finalmente, el Dueño envió a Su Hijo (Yahshua). Luka dice:

 

Entonces el dueño de la viña dijo: "¿Qué haré? Voy a enviar a mi hijo amado; quizás a éste le tendrán respeto". Pero los labradores, al verlo, razonaron entre ellos: "Este es el heredero. Matémoslo, para quedarnos con la herencia". Así que lo echaron fuera de la viña y lo mataron... Luka 20:13-15

 

Como ya estudiamos antes (ver VDA02 - La Parábola De La Viña), esta parábola fue tomada de YeshaYah 5 con algunas modificaciones para adaptarse a la época. Es una profecía que abarca todo el tiempo desde el primer Yahoshúa hasta el último (Yahshua). Bajo Yahoshúa, Elohim plantó a Yisrael como una viña en la tierra de Kenaán. A lo largo de la historia, sin embargo, se negaron a llevar fruto para Elohim, matando a los profetas y apóstoles (los enviados por Elohim). Finalmente, incluso mataron al propio Hijo.

 

Entonces, ¿qué veredicto debería pronunciarse desde la corte divina?

 

"¿Qué les hará entonces el dueño de la viña? Vendrá y destruirá a estos labradores y le dará su viña a otros". Cuando ellos lo oyeron, dijeron: "¡Nunca suceda tal cosa!". Luka 20:15-16

 

El relato de MattiYah da más detalles.

 

Por eso les digo que el reino de Elohim se les quitará a ustedes y se le dará a un pueblo que produzca los frutos del reino. MattiYah 21:43

 

Está claro, entonces, que los "otros" a quienes se les iba a dar la "viña" no son una referencia a los imperios de las bestias, sino a "UN PUEBLO QUE PRODUZCA LOS FRUTOS DEL REINO". La viña fue entregada a las naciones-bestia temporalmente, pero ninguna de ellas produciría el fruto que Elohim requería. Por lo tanto, cuando se complete el fin de los imperios de las bestias, Daniyel dice que el reino será entregado a los santos del Altísimo:

 

Yo veía que este cuerno hacía guerra contra los santos y los vencía, hasta que vino el Anciano de Días e hizo justicia a los santos del Ilayá el Supremo. Y llegado el tiempo, los santos tomaron posesión del reino. Daniyel 7:21-22

 

Este es el pueblo que produce el fruto del Reino. La nación de Yahudá, junto con la Yahrushalayim terrestre, NO ES ESA NACIÓN. Tampoco ninguna nación terrenal en el mundo político es capaz de producir tales frutos. Elohim está construyendo una nueva nación de "toda tribu y lengua y pueblo y nación" para heredar el Reino (Hitgalut 5:9). La herencia se basará en su fruto, no en su genealogía.

 

Aquellos que se identifican con la Yahrushalayim terrenal, o que consideran a esta "esclava" como su congregación madre y la capital del Reino, son ismaelitas alegóricas, según GalutYah 4:24-25). Estos son los que hoy proclaman, como los líderes religiosos de antaño, "¡Que nunca sea!". Están cegados por sus propias palabras y están de acuerdo con aquellos que rechazaron a Mashiaj como Rey. No son herederos del Reino, aunque mediante el arrepentimiento pueden llegar a ser ciudadanos del Reino.

 

Por eso es importante que entendamos la advertencia de Yahshua y que sepamos la diferencia entre las dos Yahrushalayim, no sea que consideremos la Ciudad de Sangre como nuestra madre y, por lo tanto, nos identifiquemos como hijos de la carne (GalutYah 4:29). Los únicos que producirán el fruto requerido del Reino son aquellos de quienes Shaúl habla:

 

Pero la Yahrushalayim de arriba, la cual es nuestra madre, es libre... GalutYah 4:26

 

 

¿Quién Es Nuestra Madre?

 

Shaúl expone la historia de Hagar y Sarah, tratándola como una alegoría bíblica:

 

En estas cosas hay una alegoría, pues estas mujeres son dos alianzas: Hagar es la alianza del monte Sinay que engendró hijos para esclavitud. Porque Hagar representa al Sinay, montaña que está en Arabia y corresponde a la Yahrushalayim actual, la cual es esclava juntamente con sus hijos. Pero la Yahrushalayim de arriba, la cual es nuestra madre, es libre... GalutYah 4:24-26

 

Dice que Hagar es el Antiguo Pacto y Sarah es el Nuevo Pacto. Dice además que Hagar es la Yahrushalayim terrenal, pero Sarah es la Yahrushalayim celestial.

 

Él explica que, aunque todos estamos naturalmente apegados a nuestras madres, debemos seguir la amonestación bíblica:

 

Y le dijo a Avraham: "Echa fuera a esa esclava y a su hijo, porque el hijo de esa esclava no compartirá la herencia con mi hijo Yitzjak". Bereshit 21:10

 

En otras palabras, como creyentes en Mashiaj, se espera que cambiemos nuestra lealtad a una nueva madre, es decir, de Hagar a Sarah. Shaúl explica:

 

Pero, ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo; porque jamás será heredero el hijo de la esclava con el hijo de la libre. Así que, hermanos, no somos hijos de la esclava, sino de la libre. GalutYah 4:30-31

 

Yahrushalayim es "Hagar", que NUNCA PODRÁ DAR A LUZ AL HEREDERO DE LAS PROMESAS DE ELOHIM. Aquellos que consideran a Yahrushalayim como su "madre" y la capital del Reino están reclamando a Hagar como su madre. Estos deben "echar fuera a la esclava y a su hijo, si desean convertirse en herederos de las promesas", dice Shaúl. Los creyentes sionistas, que tratan de reclamar tanto a Hagar como a Sarah como sus madres, están siendo de doble ánimo, y el libro de GalutYah se escribió específicamente para abordar ese problema. Ningún hombre puede tener dos madres.

 

La lealtad continua a la madre Yahrushalayim puede traer dolor y catástrofe cuando Elohim mismo expulse a la sierva y a sus hijos.

 

Podemos ver, entonces, la progresión en la narrativa de Luka, comenzando con el final de Luka 11 y extendiéndose hasta Luka 12:13. La sección comienza con una advertencia a los fariseos para que limpien tanto el interior como el exterior del vaso (Luka 11:39). Este problema se define en Luka 12:1 como "hipocresía" y "la levadura de los fariseos". Entre estos dos pasukim está el gran "ay" (Luka 11:47-52) por la persecución de los profetas a lo largo de la historia, que también presagió el rechazo y la muerte en el madero de Yahshua.

 

Esta fue la gran hipocresía que provocó la destrucción de Yahrushalayim en los días de YirmeYah. Sería la misma causa de la próxima destrucción de Yahrushalayim en el 70 EC a manos de Roma. Y finalmente, será la causa de la destrucción final de la ciudad en un futuro próximo.

 

Muchos creyentes hoy asumen que el gobierno israelí (o los judíos en general) se arrepentirán cuando se enfrenten a un desastre total, evitando así esta destrucción. Pero las Escrituras muestran que tal punto de vista es incorrecto, porque la ciudad ciertamente será destruida.

 

Luego quebrarás la vasija a la vista de los hombres que vayan contigo, y les dirás que así ha dicho Yahweh de los Ejércitos: Así quebraré a este pueblo y a esta ciudad, como quien quiebra un vaso de barro que no se puede volver a restaurar. En el Tófet serán sepultados hasta que no quede lugar para sepultar. YirmeYah 19:10-11

 

Además, Yahshua profetizó que la "higuera" de Yahudá nunca daría fruto:

 

Al ver una higuera junto al camino, se acercó a ella; pero no encontró nada en ella sino sólo hojas, y le dijo: "Que nunca jamás nazca fruto de ti". Pronto se secó la higuera. MattiYah 21:19

 

...aunque más tarde volvería a la vida y produciría más hoja:

 

De la higuera aprendan la analogía: Cuando su rama se pone tierna y brotan sus hojas, saben que el verano está cerca. MattiYah 24:32

 

Las hojas indican un potencial para dar fruto, pero si esa higuera alguna vez da fruto (como nación), entonces Yahshua ha profetizado falsamente. Aquellas personas que viven en Yahrushalayim o en el propio estado de Yisrael, que han llegado a creer en Yahshua y que dan un fruto genuino para presentar a Elohim, deben comprender que en algún momento pueden tener que separarse del cuerpo principal de la nación para poder evitar la pérdida cuando la ciudad sea arrojada a la gehena. No significa que perderán su salvación, sino que se verían afectados negativamente por su decisión de permanecer en una ciudad condenada. Y esto es completamente lo opuesto a lo que la mayoría de los "mesiánicos modernos ciegos actuales" está haciendo.

 

 

 

 

Lamento Por Yahrushalayim

 

"¡Yahrushalayim, Yahrushalayim, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos bajo sus alas, y no quisiste! Miren, su Casa se les deja abandonada. Les digo que no me verán más hasta que llegue el día cuando digan: "¡Bendito el que viene en el nombre de Yahweh!". Luka 13:34-35

 

¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas; porque edifican los sepulcros de los profetas y adornan los monumentos de los justos... MattiYah 23:29

 

Es característico de la ciudad hipócrita que rechazaran y mataran a los profetas y luego los honraran póstumamente, reclamándolos como propios. De esta manera se hacían parecer justos a los ojos de los hombres (como aún hoy persisten). Yahshua, sin embargo, dio a entender que no tenían derecho a reclamar a los profetas como propios, porque los habían rechazado y los habían matado.

 

El hecho era que los líderes religiosos habían rechazado continuamente la palabra de los profetas, incluso cuando decían aceptarlos. Su "aceptación" de los escritos proféticos en el canon de las Escrituras sólo fue posible al malinterpretar sus escritos, retorciéndolos para que se adaptaran a ellos. Sus interpretaciones hechas por el hombre, ahora registradas en el Talmud, hicieron que YeshaYah dijera, como se registra en MattiYah:

 

"Este pueblo me honra de labios, pero su corazón está lejos de mí. Y en vano me rinden culto, enseñando como doctrina mandamientos de hombres". MattiYah 15:8-9

 

Dado que los líderes religiosos de Yahrushalayim estaban a punto de cometer asesinato nuevamente, esta vez contra el Hijo, está claro que su oposición a los profetas estaba a punto de manifestarse una vez más.

 

 

Así dan testimonio contra ustedes mismos de que son hijos de aquellos que mataron a los profetas. ¡Bueno, pues concluyan ustedes la obra de sus antepasados! Serpientes, generación de víboras, ¿cómo escaparán de la condenación de la Gehena? MattiYah 23:31-33

 

Ser "hijo de" alguien o algo es una expresión hebrea común que indica que los hijos siguieron los pasos de sus padres. Hijos de luz, hijos de sabiduría, hijos de Avraham, hijos de haSatán; ninguno de estos términos debe tomarse literalmente como descendencia biológica. La gente comúnmente se refería a las generaciones pasadas como "nuestros padres", por lo que Yahshua señala que ellos realmente eran los hijos de sus padres en el sentido de que todavía continuaban rechazando a los profetas, hasta ese día. El ruaj asesino de sus padres todavía estaba en ellos, aunque decían ser justos.

 

Yahshua entonces les pide que completen la copa de la ira que sus padres habían comenzado. El resultado sería la destrucción de Yahrushalayim. Yahshua pregunta: "¿Cómo escaparán de la sentencia de la gehena?". No es la gehena la dicta que la sentencia, sino el tribunal divino que condena a Yahrushalayim a la destrucción en la gehena.

 

Como ya he mostrado, esta sentencia vino principalmente a través del profeta YirmeYah, cuando rompió la vasija en el valle del Ben-Hinom (Gehena). Esto se registra en YirmeYah 19, como ya vimos, donde el profeta no da ninguna palabra de esperanza para Yahrushalayim. De hecho, leemos:

 

Eso es lo que le haré a este lugar y a sus habitantes —declara Yahweh. Convertiré esta ciudad como al Tófet... YirmeYah 19:10-12

 

El valle de Ben-Hinom, o Gehena, era originalmente el lugar en las afueras de Yahrushalayim donde sus padres habían hecho sacrificios humanos (YirmeYah 19:4-5). Tofet significa "chimenea, hogar, lugar para arder". En el primer siglo, la práctica del sacrificio humano literal había sido abolida hacía ya mucho tiempo, pero aun así los líderes religiosos habían continuado sacrificando a los profetas en sus altares espirituales y pronto alcanzarían un clímax con el sacrificio del mismo Hijo de Elohim. Por esta razón, tanto YirmeYah como Yahshua testificaron contra Yahrushalayim, diciéndonos que no escaparía de ser arrojada a la Gehena.

 

De hecho, la ciudad fue destruida en el 70 EC, pero fue reparada en años posteriores. De ahí la profecía de YirmeYah 19:11 aún no ha alcanzado su cumplimiento final. En los próximos días, Yahrushalayim será nuevamente destruida y, en sentido figurado, arrojada a la gehena, como "una vasija de alfarero que no puede volver a repararse".

 

La Responsabilidad Por Todo Martirio

 

Así que Yahshua continúa su acusación contra Yahrushalayim, diciendo:

 

Miren; yo les envío profetas, sabios y escribas; y de ellos, a unos los matarán y ejecutarán en maderos, y a otros los azotarán en sus sinagogas y los perseguirán de ciudad en ciudad, para que caiga sobre ustedes toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre del justo Hevel hasta la sangre de ZejarYah hijo de BerekYah, a quien ustedes mataron entre el santuario y el altar. En verdad les digo que todo esto recaerá sobre esta generación (gennea, "descendencia", es decir, los hijos de sus padres). MattiYah 23:34-36

 

Los "profetas, sabios y escribas" que Yahshua estaba enviando a Yahrushalayim serían los creyentes de la Era de Shavuot, quienes fueron perseguidos, asesinados o expulsados del país, como se registra en el libro de Hechos. Cuando mataron a Esteban (MaAseh 7:59), "en aquel día se levantó una gran persecución contra la congregación de Yahrushalayim, y todos fueron esparcidos" (MaAseh 8:1).

 

Yahshua dijo además "PARA QUE CAIGA SOBRE TI LA CULPA DE TODA LA SANGRE JUSTA DERRAMADA SOBRE LA TIERRA". ¿Cómo podía imponerse semejante culpa a Yahrushalayim? ¿No eran responsables únicamente de la muerte de los muertos en Yahrushalayim o en esa vecindad? ¿Cómo se les podría responsabilizar por la sangre de Hevel y por toda la sangre derramada en la tierra? ¿Es esto injusto?

 

La clave se encuentra en Hitgalut, donde leemos sobre la caída del Misterio de Bavel en los últimos días, es decir, en nuestro propio tiempo.

 

Y en ella se halló la sangre de los profetas y de los santos y de todos los que han sido muertos en la tierra. Hitgalut 18:24

 

Esta acusación también se ve anteriormente en relación con la tercera copa de vino derramada en juicio sobre Bavel.

 

Oí al mensajero de las aguas decir: "Justo eres tú que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas cosas. Porque ellos derramaron la sangre de los santos y de los profetas, tú también les has dado a beber sangre, pues se lo merecen". Hitgalut 16:5-6

 

Entonces vemos que LA MISMA EVIDENCIA QUE CONDENÓ A YAHRUSHALAYIM A LA GEHENA TAMBIÉN CONDENA AL MISTERIO DE BAVEL. Si estas fueran dos ciudades distintas, ¿cómo podrían ambas ser responsables de la sangre de "todos los que han sido muertos en la tierra"? Tenemos otra clave:

 

Y sus cadáveres estarán en la plaza de la gran ciudad que simbólicamente se llama Sodoma y Mitsráyim, donde también ejecutaron en el madero al Adón de ellos. Hitgalut 11:8

 

Aquí vemos que Yahrushalayim está conectada espiritualmente tanto con Sodoma como con Egipto. Yahrushalayim es Sodoma en lo que se refiere a su inmoralidad, y es Egipto porque es Hagar, la esclava (GalutYah 4:25) y la casa de servidumbre.

 

 

 

 

La Estatua De Bavel Destruida

 

En la parábola de Yahshua de la viña, que discutimos anteriormente, Él dijo que el Reino de Elohim les sería quitado y entregado a una nación fructífera (MattiYah 21:43). En el siguiente pasuk, Yahshua advirtió a los líderes religiosos que no se identificaran con los "pies" de la estatua babilónica que el rey Nabucodonosor había visto en su sueño en Daniyel 2. Yahshua dijo:

 

Y el que caiga sobre esta piedra, será hecho pedazos, pero sobre quien caiga, lo esparcirá como polvo. MattiYah 21:44

 

Esta es una doble profecía. La primera mitad del pasuk se refiere a "la piedra que desecharon los constructores" (MattiYah 21:42). En otras palabras, el pueblo había rechazado a Mashiaj, según la profecía del Mizmor 118:22, porque Mashiaj clavado en el madero se convirtió en piedra de tropiezo para ellos:

 

...pero nosotros predicamos al Mashíaj ejecutado en el madero: para los yahuditas tropezadero, y para los gentiles locura. Qorintiyim Alef 1:23

 

La última mitad de MattiYah 21:44 se refiere a la piedra que golpeará la estatua en sus pies y triturará todos los imperios babilónicos hasta convertirlos en polvo:

 

Estabas mirando, hasta que una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó. Entonces fueron desmenuzados también el hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las eras del verano, y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Pero la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra. Daniyel 2:34-35

 

Por lo tanto, Yahshua advirtió a los líderes religiosos de Yahrushalayim que no se sentaran a los pies de esta estatua babilónica, es decir, que no se convirtieran en el último reino en la sucesión de los imperios de las bestias. ¿Fue real esa advertencia? Sí, por supuesto. La bestia final de Bavel no es Roma, sino el cuerno pequeño que se estableció después de la caída de Roma en el 476 EC:

 

Después de esto miraba en las visiones de la noche, y vi una cuarta bestia terrible y espantosa, fuerte en gran manera. Esta tenía grandes dientes de hierro. Devoraba y desmenuzaba y pisoteaba las sobras con sus pies. Era muy diferente a todas las bestias que habían aparecido antes de ella, y tenía diez cuernos. Mientras yo contemplaba los cuernos, vi que otro cuerno, uno pequeño, crecía entre ellos, y delante de él fueron arrancados tres de los cuernos anteriores. Y vi que en este cuerno había ojos, como ojos de hombre, y una boca que hablaba arrogancias...

En cuanto a los diez cuernos: de aquel reino se levantarán diez reyes. Tras ellos se levantará otro, el cual será mayor que los primeros y derribará a tres reyes. Él hablará palabras contra el Ilayá el Supremo y oprimirá a los santos del Ilayá el Supremo. Intentará cambiar las festividades y la ley; en su mano serán entregadas durante un tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo. Pero el tribunal se sentará, y se le quitará el dominio para ser exterminado y destruido por completo.

Daniyel 7:7-8, 24-26

 

Hitgalut 13 nos dice que el cuerno pequeño son en realidad dos bestias, la primera del mar y la segunda de la tierra. La primera es la bestia religiosa. La bestia de la tierra es la bestia financiera creada por varias familias judías en Europa, sobre todo la familia Rothschild. Surgió en el momento en que la bestia religiosa recibió su herida fatal cuando Napoleón tomó cautivo al Papa en 1798. Ese fue el año en que Nathan Rothschild fue enviado a Londres, tras lo cual pronto asumió el poder sobre el Banco de Inglaterra.

 

Un siglo después, la familia Rothschild jugó un papel decisivo en el establecimiento del Banco de la Reserva Federal, tomando así el control de la oferta monetaria del mundo entero. También provocaron el establecimiento del actual Estado de Israel. Hay mucha historia involucrada en esto, que no podemos registrar aquí, pero está claro que estos banqueros Rothschild no sólo inventaron la banca moderna sino que también tomaron el control del mundo a través de la bestia final de Hitgalut 13. El cuerno pequeño (la última bestia) es todo este falso sistema, tanto religioso como social, político y financiero, esta es la Gran Bavel, madre de todos los misterios. Surge la cuarta bestia de Daniyel:

 

Los diez cuernos que has visto, y la bestia, éstos aborrecerán a la ramera y la dejarán desolada y desnuda. Comerán sus carnes y la quemarán con fuego; porque Elohim ha puesto en sus corazones el ejecutar su propósito, y que tengan un solo propósito, y que entreguen su reino a la bestia hasta que se cumplan las palabras de Elohim. La mujer que has visto es la gran ciudad que tiene imperio sobre los reyes de la tierra". Hitgalut 17:16-18

 

Este cuerno pequeño es la última manifestación de la rebelión humana, completando, civilización sobre civilización, bestia sobre bestia, cuerno sobre cuerno, la intención inicial satánica: "Subiré al trono y seré como el Altísimo".

 

Por lo tanto, la advertencia de Yahshua a los líderes judíos era que estarían en peligro cuando la gran "piedra" aplastara a la estatua en sus pies. No prestaron atención a la advertencia de Yahshua, por supuesto, porque no creyeron a ninguno de los profetas cuando advirtieron de la destrucción venidera de Yahrushalayim, y porque, al final de cuentas, LA NOTA DE DEUDA DE LOS ÚLTIMOS TIEMPOS SERÍA ENTREGADA A ESAÚ DISFRAZADO DE YAAKOV.

 

Mientras miraba, se desprendió una piedra, sin intervención de manos. Ella golpeó la estatua en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó. Daniyel 2:34

 

El punto es que la estatua babilónica iba a ser juzgada completamente al final de la era. Pero como la mayoría de los imperios de las bestias ya habían seguido su curso, los líderes de la bestia final sentirían la peor parte del juicio, es decir, el sistema bancario que se ha adueñado del control del mundo. Cuando ese sistema sea juzgado, los gobiernos de todos los reinos bestiales del pasado también serán destruidos: el sistema religioso de Roma, la democracia de Grecia, la monarquía de Persia y la monarquía religiosa de Bavel.

 

De hecho, este juicio divino contra Bavel se remontará incluso a "la sangre de Hevel", quien fue el primer mártir, porque su sangre también se atribuyó a Yahrushalayim. Yahrushalayim, entonces, debe rendir cuentas por toda la sangre justa derramada sobre la tierra desde el comienzo de la historia humana. Esto sólo prueba que el sistema de la bestia final está centrado en Yahrushalayim, dirigiendo los sistemas bancarios de Roma, Londres y Nueva York. Por lo tanto, Yahrushalayim será responsable de las acciones de todos los imperios de las bestias antes de ella.

 

Esa es la base legal para el juicio divino sobre Yahrushalayim. La ciudad será destruida como una vasija de alfarero que nunca podrá repararse. Esa casa quedará desolada, y las personas individuales no verán a Mashiaj hasta que digan: "Bendito el que viene en el nombre del Adón" (Luka 13:35).

 

En otras palabras, aquellos que se arrepientan de haber rechazado a Mashiaj y se unan a Su Reino serán bendecidos en la Nueva Yahrushalayim. Aquellos que no se arrepientan durante su vida serán resucitados de entre los muertos en el juicio del Gran Trono Blanco, donde toda rodilla se doblará y toda lengua lo confesará como Adón (Filipiyim 2:9-11).

 

 

 

 

Dos Señales De La Destrucción De Yahrushalayim

 

El pasaje de Luka 13:34-35 que ya citamos (la advertencia de la destrucción de Yahrushalayim), se explica con más detalle en MattiYah, y es el punto culminante de la advertencia de Yahshua a Yahrushalayim y sus habitantes.

 

"¡Pobres de ustedes, escribas y fariseos hipócritas; porque edifican los sepulcros de los profetas y adornan los monumentos de los justos, y dicen: "Si hubiéramos vivido en los días de nuestros padres, no habríamos sido sus cómplices en la matanza de los profetas". Así dan testimonio contra ustedes mismos de que son hijos de aquellos que mataron a los profetas. ¡Bueno, pues concluyan ustedes la obra de sus antepasados! Serpientes, generación de víboras, ¿cómo escaparán de la condenación de la Gehena? Miren; yo les envío profetas, sabios y escribas; y de ellos, a unos los matarán y ejecutarán en maderos, y a otros los azotarán en sus sinagogas y los perseguirán de ciudad en ciudad, para que caiga sobre ustedes toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre del justo Hevel hasta la sangre de ZejarYah hijo de BerekYah, a quien ustedes mataron entre el santuario y el altar. En verdad les digo que todo esto recaerá sobre esta generación. "Yahrushalayim, Yahrushalayim, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían, ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste! Miren, su casa se les queda desierta, porque les digo que no volverán a verme hasta que digan: "¡Bendito el que viene en el nombre de Yahweh!". MattiYah 23:29-39

 

Hay dos signos destacados de la destrucción de la ciudad. Uno es la declaración: "No volverán a verme hasta que digan: "¡Bendito el que viene en el nombre de Yahweh!". Esta profecía generalmente se toma en el sentido de que la gente realmente hará esta declaración, y cuando lo hagan, Mashiaj regresará para salvar a la ciudad de la destrucción. Sin embargo, el patrón establecido el "Domingo de Ramos" (Sukot) dice lo contrario.

 

Las multitudes que iban delante de él y las que lo seguían aclamaban diciendo: "¡Hoshía na!". al Hijo de David; "¡Bendito el que viene en el nombre del Yahweh! ¡Hoshía na, desde las alturas!". MattiYah 21:9

 

Esta gran confesión del pueblo no anuló Su rechazo ni evitó Su muerte en el madero. Las confesiones de fe de estas personas fueron anuladas por el juicio oficial dictado por el Sumo Sacerdote y el Sanedrín. Unos cuarenta años después, Yahrushalayim fue destruida a pesar de los acontecimientos del Día de Ramos. Sin embargo, esta confesión significaba que esas personas "lo veían" como el Mashiaj, incluso si los líderes religiosos no lo veían. Aquellos que se mantuvieron firmes en su fe luego se convirtieron en parte de la congregación en Yahrushalayim.

 

 

Dando Fruto

 

La declaración de Yahshua en MattiYah 23:39 fue primero una referencia a la entrada de Yahshua en Yahrushalayim el día de la fiesta de Sukot. Sin embargo, debido a que hay dos venidas de Mashiaj, tendrá un segundo cumplimiento (mayor) en el futuro. A menudo se asume que este segundo cumplimiento representará una conversión mundial de los judíos que salvará a la ciudad en el último minuto de la destrucción. Sin embargo, esa suposición se basa en una mala interpretación de otros pasajes.

 

El malentendido surge primero cuando los hombres asumen que los judíos son Yisrael. El término "judío" es una forma abreviada de Yahudá. Yahudá no es la misma nación que Yisrael. El reino se dividió después de la muerte de Shlomó, y desde entonces fueron conocidos como Yisrael y Yahudá. Los profetas siempre distinguen entre las dos naciones y sus distintos llamamientos.

 

Yisrael y Yahudá tenían dos llamamientos diferentes. Yisrael contenía las tribus de Yósef (Efrayim y Menasheh), a quienes se les dio la primogenitura:

 

Los hijos de Reubén, primogénito de Yisrael. (Él era el primogénito; pero cuando profanó el lecho de su padre, su derecho de primogenitura se le dio a los hijos de Yosef hijo de Yisrael, de modo que no fue registrado como primogénito en la genealogía; y aunque Yahudah llegó a ser más fuerte que sus hermanos y de él procede un príncipe, el derecho de primogenitura fue de Yosef). Dibrey ha Yamim Alef 5:1-2

 

 

Yahudá recibió el cetro y era la nación a través de la cual vendría el Mashíaj-Rey:

 

El cetro no se apartará de Yahudah, ni la vara de gobernante de entre sus pies; hasta que venga Shiloh, y el homenaje de los pueblos será suyo. Bereshit 49:10

 

La primogenitura contenía el Mandato de la Multiplicación, porque Yaakov bendijo a Yósef, diciendo: "Rama fructífera (es decir, hijo) es Yósef" (Bereshit 49:22). Por eso, el profeta dice:

 

En los días venideros Yaakov echará raíces, Yisrael florecerá y brotará; y llenarán de frutos el mundo entero. YeshaYah 27:6

 

YeshaYah estaba preocupado por la Casa de Yisrael del norte, que había sido tomada cautiva por los asirios. Aunque estos se convirtieron en las "tribus perdidas de Yisrael", el profeta insistió en que cumplirían el llamamiento de su primogenitura y darían fruto para el Reino.

 

Hoshea nos dice que Yisrael daría a luz a los hijos de Elohim:

 

El número de los del pueblo de Yisrael será como las arenas del mar, que no se puede medir ni contar; y en lugar de que se les diga: "Ustedes no son mi pueblo", se les llamará "Hijos del Elohim Vivo". Hoshea 1:10

 

Esta es la base de la filiación, y Hoshea la conecta con la promesa de que Avraham tendría muchos hijos. Hoshea también nos dice que para que esto suceda, Yahudá e Yisrael deben estar unidos bajo el liderazgo de Mashiaj, porque dice:

 

El pueblo de Yahudah y el pueblo de Yisrael se congregarán en unidad y nombrarán sobre ellos a una sola cabeza; y se levantarán del suelo, ¡porque grande será el día de Yizreel! Hoshea 1:11

 

Muchos consideran que esto es exclusivo de los hijos étnicos de Yahudá e Yisrael. Ciertamente, son las principales nacionalidades que recibieron la promesa, pero incluso en la época del Tanaj, se invitó a otras personas a unirse a la nación, someterse a los pactos de Elohim y recibir todos los beneficios del Reino.

 

La profecía de Hoshea implica que ni Yahudá ni Yisrael podrían recibir la promesa de la filiación sin aceptar a Yahshua como el Mashíaj. Además, el cetro de Yahudá tenía que estar unido con la primogenitura de Yósef para poder ver la manifestación de los hijos de Elohim. La Casa de Yahudá debía cumplir su llamado al traer al Mashíaj. Pero en ninguna parte leemos que Yahudá fuera a dar frutos como reemplazo de Yisrael. Hay dos teologías del Reemplazo en los círculos creyentes de hoy: la primera enseña que la Congregación reemplazó a Yisrael y la segunda enseña que los judíos reemplazaron a Yisrael. La primera surgió en la Iglesia Católica Romana; la segunda surgió entre los creyentes sionistas. Ambas están equivocadas.

 

La verdad es que Yahudá se dividió en dos grupos: higos buenos e higos malos. Predominó el fruto malo y el resultado fue la destrucción de Yahrushalayim. Los higos malos rechazaron a Mashiaj, los higos buenos lo aceptaron. Los malos higos fueron podados de la higuera, dejando sólo a los creyentes en Mashiaj, quien es su Raíz:

 

"Yo, Yahshúa, he enviado a mi malaj para darles a ustedes testimonio de estas cosas para las congregaciones. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella brillante de la mañana". Hitgalut 22:16

 

Los buenos higos de esta higuera de Yahudá fueron injertados en la vid de Mashíaj, y muchas otras ramas étnicas se añadieron en años posteriores.

 

En otras palabras, la Congregación no reemplazó a Yahudá. Los buenos higos no reemplazaron a los malos; los buenos higos fueron el verdadero Yahudá desde el principio. Los higos malos fueron cortados de entre su pueblo, como había advertido la ley.

 

Los buenos higos creían que Yahshua era el Mashiaj, el Rey de Yahudá, de Yisrael y de toda la tierra. También tenían fe en la eficacia de Su sacrificio: Su muerte, resurrección y ascensión. En otras palabras, creyeron en Él en lo que respecta a Su primera obra. Ellos entendieron que Él cumplió la fiesta de Pésaj a través de Su muerte en el madero, la ofrenda de la gavilla mecida a través de Su resurrección y Shavuot al enviar el Ruaj haKodesh.

 

En este fin de la era, estamos llamados a creer una verdad adicional: que Mashiaj es el cumplimiento de las fiestas de otoño. Esta vez Mashiaj se manifiesta como Yósef, cuyo manto estaba manchado de sangre (Bereshit 37:31; Hitgalut 19:13). Estos son los vencedores que dan fruto para Elohim.

 

 

¿Dará Fruto Yahrushalayim?

 

Cuando se recicló la profecía de YirmeYah en el primer siglo, a Yahrushalayim se le presentó nuevamente la opción de dar higos buenos o higos malos. La ciudad fracasó y fue destruida nuevamente. ¿Vamos a creer ahora que Yahudá y Yahrushalayim darán fruto en esta tercera ocasión en la que Yahrushalayim está programada para la destrucción?

 

En MattiYah 21, poco después de la proclamación mesiánica pública de Sukot, Yahshua maldijo a la higuera, que representa a Yahudá. En MattiYah 21:19 dijo a la higuera: "Nunca más habrá fruto de ti". La higuera se secó y murió en un día. Entonces, la verdadera pregunta es si Yahshua profetizó verdaderamente, o si la higuera de Yahudá demostrará que está equivocado.

 

Yahshua siguió esta profecía, diciendo:

 

Aprende ahora la parábola de la higuera; cuando su rama ya está tierna y brotan sus hojas, sabes que el verano está cerca; así también tú, cuando veas todas estas cosas, reconoce que Él está cerca, a las puertas. MattiYah 24:32-33

 

Esto generalmente se toma como una referencia al estado judío actual de Israel que se estableció en 1948. Estoy de acuerdo con esta interpretación. Sin embargo, YAHSHUA NO DIJO QUE EL ÁRBOL DARÍA FRUTO, SINO SÓLO HOJAS. Las hojas no se pueden comer. De hecho, la higuera había sido maldecida, no porque no tuviera hojas, sino porque no tenía frutos.

 

Por lo tanto, el estado judío ha permanecido infructuoso hasta el día de hoy, y Yahshua dijo que nunca daría fruto. Sólo aquellos individuos que bendicen a Yahshua como el Mashíaj lo "verán", como indica la profecía. La nación misma, y la ciudad de Yahrushalayim, no lo bendecirán ni lo verán. Tampoco vendrá a salvar a esta Ciudad de Sangre.

 

 

Yahrushalayim, Guarida De Ladrones

 

Y les dijo: "Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada, pero la han convirtiendo en una guarida de ladrones". MattiYah 21:13

 

Esta es una cita de YirmeYah 7:11, donde el profeta estaba acusando a Yahrushalayim por su anarquía. Esta fue la causa del veredicto divino, por el cual Elohim dijo que abandonaría a Yahrushalayim como había abandonado a Shiloh tres siglos antes (YirmeYah 7:14).

 

Así que en MattiYah 21:13, este mismo veredicto se dio por segunda vez justo antes de que los romanos destruyeran Yahrushalayim. Una guarida de ladrones es un escondite, donde los ladrones se sienten a salvo de la ley y pueden hacer lo que quieran con impunidad. Así era Yahrushalayim y su templo, tanto en los días de YirmeYah como en los días de Yahshua. ¿Ha cambiado esta condición hoy? El mismo celo religioso por las tradiciones de los hombres abunda hoy en día, pero todavía no hay ninguna señal del fruto del arrepentimiento que sea necesario para evitar la destrucción total.

 

 

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Publicado por: Anunciadora de Sión

SOY CREYENTE EN YAHSHUA, MIEMBRO DE LA NOVIA, ÓRGANO DEL CUERPO, CO-EDIFICADORA DEL REINO

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Lo que proviene del Ruaj pertenece al Cuerpo, porque el Ruaj no tiene Copyright.

Y si el hombre reivindica "derechos de autor", su mensaje proviene de la carne y no sirve.

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